La Unidad Reguladora de Servicios de Energía y Agua (Ursea) comunicó que en virtud del déficit hídrico que está transitando Uruguay, la represa de Paso Severino sufre la disminución de volumen de agua más grande de la historia, que se suma a la reducción a cero de la segunda reserva, que es la del arroyo Canelón Grande.

En este marco, y como ya fue anunciado por las autoridades de OSE, en la usina de Aguas Corrientes se está tratando agua con mayores niveles de salinidad que surge como mezcla del agua proveniente del embalse de Paso Severino y del tramo inferior del río Santa Lucía.

La Ursea comunicó que se están realizando reuniones periódicas para tomar conocimiento y evaluar las medidas necesarias para mantener el abastecimiento a la población. La Comisión Interinstitucional —integrada por representantes del Ministerio de Salud Pública, de la Dirección Nacional de Aguas del Ministerio de Ambiente y de OSE— están realizando el debido monitoreo de la situación, según un comunicado difundido en las últimas horas.

“La Ursea continuará realizando los monitoreos correspondientes y reitera que esta es una medida excepcional y cuando se recupere la reserva de Paso Severino y Canelón Grande, OSE volverá a operar la usina de Aguas Corrientes como lo hace habitualmente, tomando mayormente agua dulce”, concluye el texto.