Una operadora penitenciaria fue condenada a un año de cárcel y seis de inhabilitación para ejercer cargos públicos, tras comprobarse que robó dinero a efectivos de la cárcel de Salto.
Dos internos desempeñaban tareas en los naranjales de la empresa salteña Guarino y, tras un común acuerdo, la ahora condenada de 51 años se encargaba del manejo de las tarjetas y asignación a las familias de los presos.
A partir de la última zafra, la directora del establecimiento penitenciario comenzó a encargarse de esta tarea y constató irregularidades luego de obtener el estado de cuenta de ambas tarjetas, según informó el Ministerio del Interior.
Allí aparecían gastos y movimientos que los privados de libertad no hicieron, dado que habían solicitado que se les entregue el dinero cuando recuperan la libertad. Finalmente, se pudo comprobar que desde marzo a setiembre del 2021 la mujer gastó un total de $ 47.000, dinero que correspondía a los reclusos.
Por esto, el pasado 23 de agosto la Justicia dictó la condena.