Dos estadounidenses -un soldado y un subcontratista- y un militar británico murieron este miércoles en ataques con cohetes contra una base militar en Irak, en una nueva escalada en la tensión entre Estados Unidos y sus aliados, por un lado, y entre Irán y sus combatientes, por otro.
Después de este ataque, el más mortífero en años contra una base con soldados estadounidenses, hubo bombardeos aéreos contra posiciones de combatientes iraníes en la frontera entre Irak y Siria, informó a la AFP el director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), Rami Abdel Rahman. Estos ataques aéreos mataron a 18 paramilitares iraquíes, según la misma fuente.
Es el vigésimo segundo ataque desde finales de octubre contra intereses estadounidenses en Irak. No ha sido reivindicado, pero Washington, que lidera la coalición internacional antiyihadista en Irak, suele atribuir este tipo de ataques a las facciones iraquíes pro-Irán.
A raíz de los ataques aéreos, que podrían ser represalias, se temen más actos violentos en Irak, donde la crispación entre los dos grandes aliados de Bagdad (Teherán y Washington) ya ha degenerado en los últimos meses.
"Diez explosiones"
Los dos soldados, uno estadounidense y otro británico, y el subcontratista murieron el miércoles por la noche en la base iraquí de Taji, en el norte de Bagdad, informó a la AFP un oficial de Estados Unidos.
El Pentágono confirmó la muerte de tres miembros de la coalición, incluidos dos estadounidenses. Otras 12 personas resultaron heridas en el ataque, que está siendo investigado, informó.
La coalición internacional antiyihadista liderada por Estados Unidos dio cuenta de 18 cohetes disparados.
La coalición está integrada por decenas de Estados miembros, incluido Estados Unidos, que ha desplegado 5.200 soldados en diversas bases militares en Irak.
Unas horas más tarde, "diez explosiones" sacudieron una zona al sur de la ciudad siria de Bukamal, fronteriza con Irak, informó a la AFP Abdel Rahman.
"Tres aviones, probablemente de la coalición internacional, atacaron posiciones iraníes y facciones armadas aliadas, incluido el Hashd al Shaabi" iraquí, dijo el director del OSDH, refiriéndose a las Fuerzas de Movilización Popular, una coalición de paramilitares que actualmente forman parte de las fuerzas regulares iraquíes.
Al menos "18 combatientes iraquíes" de las Fuerzas de Movilización Popular han muerto, añadió.
En el pasado, los ataques con cohetes contra soldados, diplomáticos o instalaciones de Estados Unidos en Irak mataron a un subcontratista estadounidense y a un soldado iraquí.
Parálisis política
El disparo de cohetes contra bases que albergan a soldados estadounidenses o contra la ultraprotegida zona verde de Bagdad, donde se encuentra la embajada estadounidense, es frecuente, pero la cantidad del miércoles es especialmente alta.
A finales de 2019, dos días después de la muerte de un estadounidense por el disparo de 30 cohetes contra una base militar iraquí en Kirkuk (norte), el ejército estadounidense atacó cinco bases, en Irak y en Siria, de una facción armada proiraní, las brigadas del Hezbolá, causando 25 muertos en sus filas.
El consiguiente aumento de tensión entre Washington y Teherán condujo al asesinato en Bagdad del poderoso general iraní Qasem Soleimani y de su lugarteniente iraquí en un ataque estadounidense. En represalia Irán bombardeó bases iraquíes que albergan a soldados estadounidenses.
La coalición internacional formada en 2014 contra el grupo Estado Islámico (EI) continúa luchando y brindando apoyo aéreo a las tropas iraquíes porque aunque el EI ha perdido el territorio, conserva células clandestinas capaces de cometer ataques.
El domingo dos soldados estadounidenses murieron en combates contra yihadistas en el norte de Irak. La coalición había anunciado que suspendía sus actividades en Irak debido a la tensión entre Teherán y Washington.
El parlamento iraquí votó recientemente a favor de la expulsión de 5.200 soldados estadounidenses del país, una decisión todavía pendiente de aplicación por parte del gobierno.
Irak lleva meses sumido en una parálisis política y en protestas antigubernamentales sin precedentes.
El gobierno que dimitió en diciembre todavía no ha sido sustituido por falta de acuerdo en el parlamento, el más fragmentado de la historia reciente de Irak.
Fuente: AFP