Tras la confirmación de que los restos óseos encontrados el pasado 30 de julio en el Batallón 14 de Infantería del Ejército pertenecían a un hombre, Wilder Tayler, miembro del directorio de la Institución Nacional de Derechos Humanos, contó en conferencia de prensa cómo se sigue con las búsquedas en el lugar, ubicado en la localidad canaria de Toledo.

“Las expectativas para esa subárea dentro del 14 en este momento son muy altas”, comenzó Tayler, en referencia a las casi 20 hectáreas en las que se vienen haciendo las excavaciones.

Allí también aparecieron, en junio de 2023, los restos de quien luego se confirmó que era la militante comunista Amelia Sanjurjo Casal.

“Una vez que se termina el trabajo de zarandeo que están haciendo, porque el trabajo sobre este hallazgo continúa hoy, inmediatamente se van a reiniciar las excavaciones a dos máquinas en esa área, que es relativamente chica dentro de la cautela”, apuntó el jerarca, y detalló que se hizo “una pequeña corrección en cuanto a las prioridades en excavación” en la zona.

Asimismo, Tayler aseguró que “hay una expectativa muy alta” puesta en el área, que consideró “relativamente pequeña”, y que su trabajo “se adecua a esa expectativa”. “No podemos decir más que eso por el momento”, planteó.

Tayler también se refirió a un “cambio metodológico muy importante”, implementado por el equipo actual de antropología forense liderado por Alicia Lusiardo, quien se encontraba a su lado en la conferencia.

Este cambio implica que, “una vez que han trabajado un espacio, ya no hay necesidad de volver a él”. “En una frase: lo dan vuelta enteramente”, amplió.

En esta línea, especificó que en excavaciones realizadas hace “15 años y 18 años” se estuvo “muy cerca”, tanto del hallazgo de Sanjurjo como del realizado hace dos semanas.

“En este hallazgo reciente, incluso se estuvo a un metro del borde de la fosa”, contó.

“Nos parece que el mérito va a los colegas antropólogos. Esto también implica trabajar durante muchísimo más tiempo en todo el año, y en condiciones complejas, pero que evidentemente nos está dando resultados”, destacó.

Por último, recordó que esta metodología se aplica “porque quienes saben dónde están, no lo dicen” y, por eso, no se trabaja “con un plano, una flecha o una cruz”.

“En ocasiones, cuando lo hemos hecho así, no ha resultado ser exacta la información. Pero, de esta manera, estamos seguros de que lo que se haga nos va a dejar la certeza de que en ese lugar, por lo menos, no hay un cuerpo”, sentenció.

Además de Tayler, la conferencia contó con la presencia del ministro de Defensa, Armando Castaingdebat; la líder del equipo de antropología forense que trabaja en el lugar, Alicia Lusiardo; el fiscal especializado en Crímenes de Lesa Humanidad, Ricardo Perciballe; representantes de Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos Desaparecidos; y el fiscal de Corte, Juan Gómez.

Las autoridades informaron que los restos óseos encontrados pertenecen a un hombre cuya estatura era de entre 1,75 y 1,85 metros, y su rango etario al momento de su muerte era entre los 43 y 57 años.

Sin embargo, todavía no se manejan nombres de quién podría ser esa persona.