Seis de cada diez uruguayos entienden que las medidas de distanciamiento social para frenar el avance del coronavirus reducirán los ingresos de su hogar, según una encuesta de Opción Consultores.
Un estudio que analiza la confianza del consumidor y las estrategias de financiamiento de los hogares en el contexto de la pandemia de coronavirus señala que un 26 % de los uruguayos evalúa como mala o muy mala su situación económica, mientras que solo percibe una buena o muy buena situación el 21 % de la población.
En esta encuesta, que fue realizada entre el 27 y el 30 de marzo, una de las preguntas fue: "¿Cómo evalúa la situación económica actual del país en general?". La respuesta deja en evidencia que el shock generado por las medidas de distanciamiento social se traduce de forma directa en un deterioro de la confianza económica de la población uruguaya.
Concretamente, un 54 % entiende que la situación económica del país es mala o muy mala y solo un 16 % entiende que es buena o muy buena. En cuanto a la percepción de cara al próximo año, esta no cambia demasiado con respecto a la percepción del presente. Un 49 % entiende que la situación económica empeorará, mientras que solo un 33 % entiende que mejorará.
Cuando la pregunta fue dirigida a la situación económica personal y de cada familia en la actualidad, la respuesta de uno de cada cuatro uruguayos fue negativa. Un 26 % respondió que su situación es mala o muy mala, mientras que solo un 21 % expresó que es buena o muy buena.
Más concretamente, un 62 % de las personas cree que los ingresos de su hogar disminuirán el mes que viene. Solo un 2 % cree que sus ingresos serán mayores.
"¿Cuál será la principal estrategia que tomará en su hogar para afrontar la situación de una reducción de los ingresos?", fue una de las preguntas, a lo que un 89 % respondió que reducirá sus gastos. Un 32 % dijo que utilizará ahorros mientras que un 23 % también manifestó que pedirá ayuda a familiares, amigos o conocidos. Un 19 % asumió que se endeudará con su tarjeta de crédito, mientras que un 14 % dijo que pedirá préstamos bancarios.
Básicamente, el shock generado por las medidas de distanciamiento social sobre la economía se traduce de forma directa en un deterioro de la confianza económica.
Durante el año 2019, los uruguayos se dividían entre quienes evaluaban la situación económica como positiva (34%) y de manera negativa (24%), primando la visión de una economía cuya marcha era percibida como "regular" (41%). La actual emergencia sanitaria impacta en un fuerte ascenso de los juicios negativos, desde una media de 24% en 2019 a un 54% en el contexto del COVID-19.
Si se lo compara con registros de confianza del consumidor del año 2002, período en el que la economía sufrió un shock de elevada magnitud, el deterioro de las expectativas parece no ser tan profundo como en aquella oportunidad.
Opción Consultores señala en su síntesis del trabajo que es factible que en el actual escenario de contracción económica, al igual que en períodos recesivos del pasado, se pueda observar como contracara de las estrategias de ahorro de los hogares el fortalecimiento de segundas marcas competitivas en precio, marcas blancas y, potencialmente, el comercio informal.