El Consejo Directivo Central (CDC) de la Universidad de la República (UdelaR) emitió una resolución luego de la situación generada tras la colocación de un cartel a favor del sí para derogar 135 artículos de la Ley de Urgente Consideración (LUC) en la fachada del edificio de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo (FADU).
El CDC resolvió “señalar la vocación democrática de la Universidad de la República”, la que debe “ser un espacio donde todas las posiciones sobre los temas de interés general han de tener cabida, con un único límite: el respeto recíproco y la ausencia de proselitismos político-partidarios o religiosos”.
También decidió propiciar “espacios de discusión y debate sobre laicidad y sobre el uso de los espacios físicos de la institución bajo la égida del principio democrático de la pluralidad”.
Por otro lado, reafirman “la necesidad de que Uruguay se encamine en un proceso de discusión y señalamiento de diferencias en clave adecuada y sobre la base del respeto hacia los otros”.
Además, el CDC rechazó “las agresiones que se observan en redes sociales y en espacios no institucionales” y, en particular, manifestaron “su solidaridad con las autoridades universitarias quienes fueron objeto de claros agravios en estas circunstancias”.
Por último, encomiendan al rectorado “la instrumentación de espacios de discusión y debate sobre laicidad y sobre el uso de los espacios físicos de la institución bajo la égida de ese principio democrático de la pluralidad: que todas las posiciones tienen que tener la posibilidad de ser expresadas”.
El decano de la FADU, Marcelo Danza, informó que el cartel fue colocado por la Intergremial de la FADU y que fue retirado tras orden del rectorado de la UdelaR. Luego de la orden del rectorado, el diputado colorado Felipe Schipani entregó una carta solicitando que se quite el cartel.
En una extensa carta, Danza detalló cómo fue la situación y consideró que no se deben “cambiar las prácticas del diálogo y el debate fraterno por la confrontación sorda y la invención de enemigos”. “No en el ámbito universitario. Ese camino solo nos conducirá a un empobrecimiento intelectual sin retorno”, señaló.
“No aceptaré ni estimularé el odio como algo normal, liviano o divertido. Quiero seguir siendo un profesor universitario, amo la docencia y las disciplinas que se enseñan en nuestra facultad. Quiero continuar estimulando en este espacio el libre pensamiento y la convivencia creativa y democrática. Quiero seguir siendo arquitecto y dedicar mi energía a pensar y diseñar espacios de encuentro que den placer y calidad de vida a todas las personas”, sostuvo el decano de la FADU en la misiva.