En Cabildo Abierto, el anuncio de renuncia del ministro de Salud Pública Daniel Salinas no fue una sorpresa. Ya en 2020, el secretario de Estado había adelantado que su paso por la política iba a ser “fugaz”.

El pasado lunes, Salinas le comunicó su decisión al senador Guido Manini Ríos y el martes al presidente de la República, Luis Lacalle Pou.

A decir verdad, cuando el ministro asumió sus funciones en marzo de 2020, era una persona ajena al ecosistema político y conocido por muy pocos dentro de ese ambiente. Pero 13 días después emergieron los primeros casos de coronavirus y su rol dentro del gobierno comenzó a crecer.

La buena gestión que realizó al frente de la pandemia explica, en parte, que hoy en día sea uno de los ministros más populares y con mayor aceptación dentro del gabinete multicolor. Esta última razón hace inevitable que los cabildantes piensen en las elecciones de 2024.

Según supo Montevideo Portal en diálogo con fuentes del partido de coalición, la intención es que Salinas integre la fórmula presidenciable junto a Manini Ríos. En ese sentido, los próximos meses serán vitales en pos de convencer al ministro para que encuentre en la política su futuro laboral.

Cuando a Salinas se le presentó la oportunidad de dirigir la Organización Panamericana de la Salud (OPS), encontró una salida perfecta para dejar sus funciones y seguir dedicado a la medicina así como también a la gestión.

Sin embargo, al obtener un magro resultado de cuatro votos, esa chance quedó en el olvido. Si bien aún puede integrar uno de los dos puestos de dirección que restan por ser ocupados, en los hechos es muy difícil que lo logre teniendo tan pocos adeptos.

En Cabildo Abierto entienden que el objetivo del ministro es seguir vinculado a la medicina, pero también son firmes creyentes en que puede tener un rol “importantísimo” en la campaña electoral de cara a las próximas elecciones.

Sea como sea, es claro que con la renuncia Salinas dejó a entrever la posibilidad de un futuro netamente político. Solo el tiempo dirá si esta oportunidad, que suena en la cabeza de los cabildantes como Manini Ríos-Salinas, se concretará o no.

La elección a la OPS

En la reunión del lunes, en la que Salinas comunicó su decisión a la interna de Cabildo Abierto, también afirmó que estaba “un poco desanimado” porque el gobierno uruguayo no hizo campaña por su candidatura a la OPS.

“Él lo que sintió es que lo dejaron solo. Todos apoyaban su candidatura, pero nadie se la jugó. Nadie del Ejecutivo salió a viva voz a jugársela por que él fuera el más votado”, dijo una fuente.

Esta situación se agravó luego de los cambios en el decreto sobre la política antitabaco que aprobó Lacalle Pou. Para Salinas, tal como dijo el senador Guillermo Domenech, esta normativa lo dejó entre la espada y la pared, además de afectar negativamente su imagen en la OPS.

La vara muy alta 

En el Ministerio de Salud Pública (MSP) tampoco sorprendió la determinación de Salinas; es más, ya se la veían venir.

Más allá de que entienden que su desempeño al frente de la cartera fue extraordinario, el único pedido que tienen pensado es que el equipo no sufra modificaciones. El motivo que argumentan es que gran parte del éxito que obtuvo Salinas se debe al grupo humano que se formó.

La sustituta que propuso Cabildo Abierto es Karina Rando, quien actualmente está al frente de la dirección general de Coordinación del MSP. En la cartera dan por bueno que será la futura ministra, más allá de que aún falta el visto bueno de Lacalle Pou.

Karina Rando. Foto: Gastón Britos / FocoUy

Karina Rando. Foto: Gastón Britos / FocoUy

“Salinas dejó la vara muy alta, y no dudamos de que Rando podrá hacer un buen trabajo. Pero llegado el momento le vamos a pedir que los roles clave dentro del MSP no se toquen”, agregó una fuente de la cúpula ministerial.