El Sindicato de Policías Agremiados Canarios (Sidepac) divulgó un comunicado en la tarde de este viernes respecto al suicidio de un agente policial en Canelones, sucedido este jueves, donde alertan por “el silencio abrumador del Ministerio del Interior ante el reclamo atronador de los olvidados del sistema”.
El agente policial que se quitó la vida en San Ramón tenía 42 años. El suceso se suma a otros tres fallecidos por la misma causa en el mes de mayo, en Melo, Fray Bentos y Barros Blancos. En ese sentido, el presidente del sindicato, Fernando Bazzano, había definido la situación como “otro olvidado del sistema”.
Es por esto que el Sidepac desarrolló una serie de propuestas tras reunirse con la Dirección Nacional de la Sanidad Policial. En primer lugar, exigen implementar educación en relaciones humanas, laborales y en salud mental a mandos superiores y quienes tengan mandos a su cargo, con el fin de identificar y comprender la enfermedad. También pretenden focalizar la atención en centros o seccionales que tengan un “número importante de certificaciones psiquiátricas”, para identificar si las causas provienen del entorno. Además, exigen que las oficinas médicas realicen “un seguimiento constante” de los policías con certificaciones por parte de los psicólogos pertenecientes a cada jefatura.
Aseguran que las propuestas no necesitan recursos extras y que pueden abordarse con “lo existente y de forma inmediata”.
“Este sindicato sigue sosteniendo que la prevención en salud mental debe de ser el pilar principal y debe ser abordado por profesionales externos, terapia subsidiada por el Estado”, finalizó el comunicado.