El Servicio de Paz y Juticia (Serpaj), organización dedicada a la defensa de los derechos humanos, calificó como "grave" la detención irregular de la trabajadores de una panadería y advirtió que incluso "es más grave aún por lo que representa, por lo que oculta, por lo que invisibiliza, y por las consecuencias que tiene en el universo simbólico".
A través de un comunicado, la organización consideró que el procedimiento policial registrado en la filmación que se viralizó "está plagado de irregularidades, groseras, brutas, propias de una mala interpretación de criterios procedimentales establecidos en los marcos de intervención para estas ocasiones".
Serpaj advierte incluso que la situación "visibiliza un engranaje estatal de la reproducción cultural del heteropatriarcado".
Según la organización, la actitud de los policías puede interpretarse como una "ceremonia de degradación", que opera "produciendo identidades inferiores". Al respecto, especifica que "los niños, niñas, adolescentes, mujeres, mujeres trans, pobres, locos, son sujetos habituales de estas ceremonias".
Serpaj valoró la importancia de que el incidente haya sido registrado en video pero advirtió también sobre "las mismas situaciones que ocurren sistemáticamente en otros barrios de Montevideo donde las respuestas policiales son aún más irregulares e ilegales".
La organización advierte también sobre "el relato policial que la misma ciudadanía reclamaba" en el caso, cuando pedía que los efectivos "vayan a buscar a los chorros".
"Si nos acostumbramos a este tipo de violencias e ilegalidades, legitimamos prácticas de 'racionalización' e 'institucionalización' propias de un estado policial, amparado en una modernización estructural, pero con la misma pasión punitiva propia de otras décadas", complementa Serpaj.