En 2022, el sector de las Tecnologías de la Información (TI) facturó en Uruguay US$ 2.840 millones, teniendo un impacto total del Producto Interno Bruto (PIB) nacional del 4,3%, según surge de un estudio realizado por la consultora CPA Ferrere.
Las exportaciones del sector alcanzaron ese año los US$ 1.816 millones, lo que equivale al 65% de la facturación total de ese rubro.
En esta línea, CPA destacó que el sector “se ha establecido como un componente crucial de la economía uruguaya”, y se “consolida como uno de los cinco principales rubros de exportaciones del país”.
“Esto implica que en algunas de estas dimensiones sea comparable a grandes cadenas del Uruguay, como la industria forestal, la cadena cárnica y el sector turístico”, consignó CPA.
Por encima del sector TI, en 2022 solo lo superaron en ventas al exterior: el sector cárnico (US$ 3.211 millones), la industria forestal (US$ 2.476 millones), la soja (US$ 1.922 millones) y el turismo (US$ 1.830 millones).
Con respecto a las exportaciones, el 85% fueron dirigidas principalmente a Estados Unidos, destacándose en particular el modelo de negocios de “software factories” (desarrollos de software).
El trabajo también destaca que el sector tecnológico genera 22 mil empleos directos de calidad, más 50.000 puestos de trabajo indirectos, considerando proveedores y el consumo de los trabajadores del rubro. El salario promedio del sector, según surge del informe de CPA, es de $ 91.000 y hay más de quinientas empresas dedicadas en Uruguay al rubro.
“Su influencia en el desarrollo económico de Uruguay es fundamental, ya que impulsa la innovación, la productividad y aumenta la competitividad en el escenario global no solo del rubro TI, sino de otras industrias”, destaca el trabajo.
Sin embargo, el estudio también destaca “desafíos” para el desarrollo del sector a futuro. En esta línea, señala que existe “diferencia entre la oferta educativa y la demanda de perfiles especializados necesarios para mantener la competitividad internacional del sector”.
Además, el informe “reconoce un encarecimiento estructural de Uruguay en comparación con otros competidores, lo que ha resultado en una pérdida de ventaja competitiva en cuanto al precio, un factor exacerbado por fluctuaciones en el tipo de cambio real y otros componentes estructurales”.
No obstante, el trabajo reconoce que el sector TI crece más que el promedio de la economía y su participación en el PIB se viene duplicando cada 10 años.
El estudio, realizado a pedido de la Cámara Uruguaya de Tecnologías de la Información (CUTI), fue presentado este martes en el Auditorio del LATU. Contó con la presencia de la vicepresidenta de la República, Beatriz Argimón; la ministra de Industria, Elisa Facio; el de Trabajo, Pablo Mieres; entre otras autoridades gubernamentales y empresarios.
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