El 22 de mayo de 1960, hace 60 años, se registró un sismo en Valdivia (sur de Chile) de 9,5 grados en la escala de Richter, considerado el mayor de la historia de los que se tiene registro y que tuvo réplicas de menor intensidad durante cinco días. Murieron entre 5.000 y 6.000 personas en el país y provocó un tsunami que ocasionó 61 muertos en Hawai y otros 32 en Filipinas.
El megaterremoto de Valdivia de 1960, conocido también como el Gran terremoto de Chile, se desencadenó a las 15:11 hora local del domingo 22 de mayo de 1960. Su epicentro se localizó en las cercanías de Traiguén, provincia de Malleco (actual Región de La Araucanía, Chile), y tuvo una magnitud de 9,5 en la escala abierta de Richter, siendo el más potente registrado instrumentalmente en la historia de la humanidad.
Junto con el evento principal, se produjo una serie de movimientos telúricos de importancia entre el 21 de mayo y el 6 de junio, afectando a gran parte del centro y sur de Chile.
El sismo fue percibido a nivel planetario y produjo una serie de maremotos cuyo alcance se extendió a diversas localidades a lo largo del océano Pacífico, incluyendo Hawái y las costas de Japón, así como la erupción del volcán Puyehue, que cubrió de cenizas el lago homónimo. Se estima que esta catástrofe natural y sus eventos asociados costaron la vida de entre 19996 y 21907 personas, y dejaron unos dos millones de damnificados.
A seis décadas de este evento catastrófico, investigaciones internacionales dan cuenta de lo hoy sabemos tras años de investigación. Estudios que muestran, por ejemplo, que el terremoto de 1960 liberó 25 veces más energía que el sismo de 2010 conocido como el "27F".
Gabriel González, académico de la Universidad Católica del Norte (Chile) , señala que se logró establecer que este terremoto fue precedido por una secuencia sísmica que se inició la madrugada del 21 de mayo con un sismo de magnitud 8.3, localizado bajo la costa de la ciudad de Lota. "Este sismo se sintió con fuerza en la Región del Biobío. La secuencia de sismos precursores fue completada por ocho sismos de magnitudes superiores a 5.8, dos de los cuales alcanzaron una magnitud 7.3 y uno una magnitud 7.8", asegura el experto en declaraciones recogidas por el medio trasandino BioBío Chile.
Hasta hoy los científicos siguen tratando de descifrar los enigmas de este evento, asegura Marcos Moreno, académico de la Universidad de Concepción. "Es un tipo de superterremoto, que necesita un tiempo largo, de varios siglos, para acumular la energía necesaria que permite generar un evento tan grande. Estudios históricos liderados por Marco Cisternas de la U. Católica de Valparaíso, sugieren que este tipo de terremotos tiene una recurrencia de más de 300 años. Este largo periodo llamado ciclo sísmico -que integra etapas de acumulación y posterior liberación de la energía sísmica-, es más largo que la escala temporal de la vida humana, por lo tanto, un obstáculo para la comprensión a cabalidad de estos procesos", explica al citado medio.
En sus redes sociales, el músico y productor radicado en Valdivia, Patrick Moore Music, publicó en redes sociales un fragmento de su trabajo '9.5 Richter' realizado junto al artista visual Jorge Navarro Giovanetti.