La tormenta política desatada en las últimas semanas en torno a la Comisión Técnica Mixta de Salto Grande (CTM) continúa generando consecuencias.

Tal como informáramos, la primera cabeza en rodar fue la de Carlos Albisu, presidente de la representación uruguaya en el órgano binacional desde el principio de la actual administración. El jerarca, líder a de la Lista 404 en Salto, renunció luego de que se conociera de numerosos ediles de su sector en la plantilla de funcionarios de la CTM.

El sustituto elegido para el cargo fue Martín Burutarán, un dirigente de confianza del renunciante Carlos Albisu que ingresó durante su administración.

El futuro de Burutarán en la CMT pasó a ser incierto luego de que el Frente Amplio y Cabildo Abierto aprobaran en el Parlamento una iniciativa que proponía que se pidiera la renuncia a toda la representación uruguaya en la entidad binacional.

Ayer, el coordinador de Desarrollo Regional de la Secretaría de la delegación de la CTM, Pablo Constenla, también edil por la lista 404 del Partido Nacional, se convirtió en el segundo funcionario a renunciar. Posteriormente, el presidente Lacalle Pou aseguró que se producirían “más renuncias” en la comisión.

“Va a haber más renuncias, va a haber renuncias a Salto Grande, va a haber renuncias a la Junta Departamental. Muchos de estos funcionarios, los que no renuncien, van a pedir que sus contratos sean a término. Así que estamos actuando en consecuencia”, dijo el presidente ayer ante los medios.

Esta mañana se conoció que el tercer renunciante es Burutarán. Sin embargo, seguirá al frente de la entidad.

Walter Méndez presidente del Sindicato de Salto Grande, explicó esta aparente contradicción.

En declaraciones telefónicas al programa Desayunos informales (Canal 12), Méndez explicó que Burutarán renunció en tanto funcionario de la CMT, pero “mantiene el cargo político” que le adjudicó el Poder Ejecutivo días atrás, cuando se concretó la salida de Albisu. Así las cosas, seguirá ocupando la presidencia de CMT por Uruguay, aunque deje de ser funcionario.

Méndez agregó que ayer también se llevó a cabo la reunión mensual entre las representaciones de ambos países, instancia en la que la representación uruguaya notificó oficialmente a su par de la vecina orilla la decisión del Ejecutivo de recategorizar a funcionarios.

Según informara el matutino El País, la representación argentina dio el visto bueno a la decisión uruguaya. En las próximas horas, de los 36 funcionarios que ingresaron de forma directa, 13 pasarán a calidad de contratados, cuatro renunciarán, a dos ya no se les renovó el contrato, a uno no se le va a renovar en el momento en que venza —a fines de este mes— y otro ya renunció. Los restantes 15 continuarán sin modificaciones, puesto que prestan servicios en el complejo hidroeléctrico y la delegación argentina no aprobó que se hicieran cambios con esos cargos.

En cuanto a los ediles que ingresaron a la CMT, deberán renunciar ese cargo o a la Junta Departamental, y no podrán permanecer en los dos. De acuerdo con el citado informe, dos de ellos decidieron renunciar a ambos puestos.