El excandidato a la Presidencia por el Partido Nacional, Álvaro Delgado, dio su primer discurso público este sábado luego de perder el balotaje el pasado domingo 24 de noviembre. En un acto del sector D Centro, el dirigente habló de la “rabia” que sintió al ser derrotado, para luego proyectar a futuro y hablar de tres desafíos que su partido tiene que enfrentar.
“Para mí no es fácil hablar hoy, porque es la primera salida que tengo después de un resultado que nos golpeó, nos llenó de dolor, de impotencia […] A todos nos dolió perder la elección, obviamente que sí. No sería blanco y no correría esta sangre por mis venas si no tuviera dolor, un poquito de rabia, pero aceptando siempre el resultado popular”, manifestó el exsecretario de Presidencia al hacer uso de la palabra.
De todas formas, indicó que “ya vendrán los tiempos de análisis” de la derrota, los cuales “son necesarios, serios y profundos, con responsabilidad, unidad y fraternidad”, reflexionó.
Sin embargo, indicó que esa autocrítica deberá hacerse después de mayo, es decir, una vez pasadas las elecciones departamentales y municipales, ya que “los análisis se hacen después de que terminen los procesos electorales”.
“Sepan que, en lo personal, voy a estar escuchando a todos. Vamos a estar escuchando a todos para generar esto una oportunidad para ser mejores”, enfatizó el expresidenciable.
Así, aseveró que el primero de los tres desafíos del Partido Nacional para el futuro es el de su rol de oposición. “Ahí tenemos que ser el partido articulador de la coalición que funcione, que haga lo que tenga que hacer que es colaborar en aquello que sea necesario y oponerse a aquello que nos quieran quitar a lo que conquistamos”, argumentó Delgado. “No vamos a permitir que la ideología nos quite derechos y libertades”, insistió.
En tanto, el segundo desafío está vinculad con las próximas departamentales. Ante esta instancia electoral, Delgado sostuvo que el Partido Nacional tiene “la responsabilidad
no solo de mantener las intendencias” que tiene, sino “de ir por algunas más”.
Finalmente, el tercer desafío es uno más general: el futuro del Partido Nacional en sí mismo.
De esta manera, el excandidato señaló que se necesita “un directorio con peso político, firme, abierto” y que tenga “la opinión de los intendentes, alcaldes, ediles, jóvenes [y] mujeres”. “De todo el partido”, expresó.
Asimismo, instó a que el directorio “se dedique cinco años a recorrer” el país, escuche a la gente y “ensanche las bases” del Partido Nacional.
“Creo que es el desafío más grande que tenemos. Podemos construir un nuevo Partido Nacional” donde sea un partido de unidad y fraternidad”, finalizó Delgado.