La Real Academia Española (RAE) emitió un comunicado en las últimas horas en la que manifestó “su profunda preocupación” por la noticia del cierre de la Academia Nicaragüense de Lengua.
La Academia fue disuelta este martes por ley tras casi 94 años de existencia, en uno de los golpes más duros contra la cultura que ha propinado el Gobierno del presidente Daniel Ortega, al aprobarse de forma urgente en la Asamblea Nacional su disolución con 75 votos de diputados sandinistas y sus aliados. Los otros 16 legisladores, de los 91 que integran el Parlamento, se abstuvieron y ningún legislador hizo uso de la palabra durante el debate.
Según la RAE, la propuesta realizada a la Asamblea Nacional de Nicaragua priva de “personalidad jurídica a la corporación centroamericana y causará su desaparición después de 94 años de fecunda existencia al servicio del mayor valor cultural de la nación”.
.“La RAE, que defiende las libertades de pensamiento, expresión y asociación como los primeros valores de cualquier sistema de convivencia, respalda y reivindica enérgicamente el legítimo derecho de la Academia Nicaragüense de la Lengua a servir a sus conciudadanos y a hacer posible la participación de Nicaragua, en términos de igualdad, en la preservación del bien cultural superior tanto de la propia nación como de la comunidad de naciones y pueblos que comparten la misma lengua, hoy patrimonio común de casi 600 millones de personas en todo el mundo”, señaló la institución.
En esta línea, agregó que “en solidaridad con los académicos de Nicaragua”, la RAE reclamó el apoyo y la adhesión de las instituciones públicas y privadas “de todo el ámbito hispano hablante a fin de evitar la desaparición de la Academia Nicaragüense de la Lengua”.
Por su parte, el escritor español e integrante de la RAE Arturo Pérez-Reverte se manifestó sobre la intención del gobierno de Daniel Ortega de impulsar el cierre de la Academia Nicaragüense de Lengua.
“Esto es importante, y muy grave. En un siglo de existencia de las academias hermanas de la lengua española en América, nadie se había atrevido nunca a ir tan lejos como la siniestra dictadura de Nicaragua, tan admirada en España por algunos miserables”, escribió Pérez-Reverte en Twitter.