Noruega comenzó a construir un túnel submarino de cuatro carriles que pretende ser el más largo y profundo del mundo. El proyecto, denominado Rogfast, unirá Randaberg y Bokn, dos distritos separados por 26 kilómetros de ancho, consignó The Telegraph.
La obra vial sustituirá la necesidad de usar ferrys, cuya frecuencia es menor en invierno, y disminuirá el viaje de 21 a 11 horas de la autopista E39, que va desde Trhndheim en el norte a Kristiansand en el sur.
Rogfast será parte de una inversión de más de US$ 2000 millones; también incluirá túneles que “flotarán” en el mar.
Los túneles alcanzarán los 400 metros bajo tierra y también será un hito en el mundo de la ingeniería civil. Prevén que las obras estén finalizadas para 2026.