Presidenta de Sifpom sobre chats con Astesiano: “Da impotencia que te quieran ensuciar”

El jueves, la divulgación en prensa de nuevos contenidos de la carpeta fiscal del caso Astesiano puso bajo la lupa a Patricia Rodríguez, presidenta del Sindicato de Funcionarios Policiales de Montevideo (Sifpom), uno de los sindicatos policiales del país.

En chats divulgados por el semanario Búsqueda, se establecía que Rodríguez y Astesiano habían mantenido diálogos cordiales en más de una ocasión.

De las conversaciones se desprende que la sindicalista pidió al excustodio que intercediera para conseguir con rapidez una reunión con el presidente Lacalle, encuentro que se concretó en la residencia presidencial días después de esa conversación.

La revelación generó reacciones encontradas en distintos sindicatos policiales. La Unión de Sindicatos Policiales (USIP) emitió un comunicado en el que manifestaba total apoyo a su dirigente, y aseguraba que nada de lo divulgado en el artículo de prensa constituía novedad.

En contrapartida, la Coordinadora Nacional de Sindicatos Policiales emitió otro comunicado en el que se desmarcaba de la USIP y aseguraba que los chats nos “retrotraen a tiempos oscuros que vivió nuestra sociedad en un pasado no muy lejano”.

“Como ya hemos sostenido, nunca nos representó, no nos representan y no nos representaran jamás”, indicaba el texto, en referencia a Sifpom.

Posteriormente, la propia Rodríguez utilizó sus cuentas personales en redes sociales para referirse al tema.

En su descargo, Rodríguez destaca que la nota publicada el jueves en Búsqueda “no dice nada nuevo, ya que desde el mes de diciembre, se había anunciado que habíamos tenido contacto con el responsable de la custodia presidencial”.

En cuanto al modo en el que surgió el contacto, explica: “[a Astesiano] lo conocimos en una de esas reuniones en la Torre Ejecutiva, que todos los sindicatos piden para plantear sus problemáticas. Allí nos contó que había sido policía y que la había pasado muy mal económica y laboralmente. Decía que eso hacía que viera como positivo que existieran sindicatos y que ‘estaba a la orden’. Se mostró siempre atento a nuestros mensajes, que eran pidiendo el apoyo para actividades solidarias para afiliados o familiares en situación de vulnerabilidad”.

Según la sindicalista, en las conversaciones divulgadas “no hay un solo mensaje que afecte nuestra conducta ética ni la del Sindicato que representamos.”

Asimismo, enfatiza que, en las fechas en que se produjeron esos diálogos, “ni nosotros, ni la sociedad en su conjunto, teníamos conocimiento de las situaciones que hoy llevan a que el Sr. Astesiano se encuentre indagado por la Justicia”.

También señala que tales intercambios “estuvieron referidos a temas vinculados con actividades que estaban en la agenda de nuestro Sindicato. Por ejemplo, solicitando una reunión urgente con el presidente por temas vinculados a la salud mental o que se apoyara la fiesta del Día del Niño y Reyes”.

Sobre  “lo referido a las comunicaciones sobre la visita del Presidente a Soriano”, instancia en la que Rodríguez pidió a Astesiano que visitara a una oficial damnificada por inundaciones, “estas se originaron cuando a través del delegado departamental de nuestro sindicato, nos enteramos de la situación extrema que estaba viviendo un policía que había perdido todo durante el temporal”.

Respecto a Astesiano como persona, la dirigente sindical lo describe como “un hombre que se mostraba receptivo a nuestros planteos y ahí aún no se sabían las actuales investigaciones penales que se llevan adelante por la Fiscalía”. Pese a ello, “cuando perjudicó laboralmente a una policía por su maternidad, este sindicato lo denunció el 4 de octubre del 2022”.

“La Comisión Directiva del Sindicato Policial sabía y sabe cada paso que doy, pero entiendo las consecuencias de ser una persona pública”, concede.

“También soy consciente que en esta sociedad, todavía atravesada por prejuicios políticos, culturales y de género, molesta a mucha gente que una Mujer Policía, esté presente en el debate nacional y además no siga rebaños ideológicos”, reflexiona en el texto.

“Da impotencia y tristeza que te quieran ensuciar o mezclar con una causa donde una no tiene nada que ver”, lamenta.