Por unanimidad, el Senado aprobó este martes la venia para la designación de la nueva embajadora de Uruguay en Venezuela, Silvana Montes de Oca.
En medio de rispideces y cuestionamientos sobre si Uruguay debe tener o no funcionarios en el país caribeño, todos los partidos políticos votaron, por 27 a 27, a favor de Montes de Oca, a quien destacaron su carrera profesional.
Montes de Oca ingresó en 2002 como funcionaria del Ministerio de Relaciones Exteriores, a través de un concurso. A lo largo de su trayectoria, se desarrolló como directora de la dirección de Medio Ambiente, directora de la dirección del Mercosur y de Asuntos Consulares. Es, además, abogada y escribana.
El senador del Frente Amplio (FA) José Carlos Mahía destacó la trayectoria de Montes de Oca, cuya elección consideró una “muy buena decisión”.
“No nos escapa a ninguno de nosotros que este destino que le toca a la embajadora no es uno fácil, que no está exento de toda la polémica que se ha desarrollado aquí en sala incluso”, destacó Mahía.
Así, el legislador recordó que durante una reunión previa Montes de Oca consideró la circunstancia a la que se enfrentará y que “colectivamente” los partidos políticos reflexionaron sobre la “importancia” de que haya una representante uruguaya en Venezuela.
Para Mahía, la decisión de tener un presentante en el país caribeño “tiene que ver con una decisión de Estado”.
Por su parte, el senador colorado Pablo Lanz también destacó el currículum y la experiencia de Montes de Oca. Si bien desde el Partido Colorado votaron la venia, el legislador señaló que “esta designación, sin lugar a duda, podría haber sido sustituida con un funcionario de menor rango al frente de la Embajada”.
“Compartimos la posición de que debemos tener un espacio en Venezuela con nuestra representación, pero, sin lugar a dudas, dadas las ultimas circunstancias entendimos que hubiera sido muy importante para el país, para la región, ante la coincidencia de los comunicados pronunciados por nuestra Cancillería, haber tomado un tiempo y haber designado a un funcionario de menor rango”, agregó.
En tanto, en representación del Partido Nacional, Sebastián Da Silva consideró que la elección de Montes de Oca es “favorable”, sobre todo, para tener un “interlocutor frente a gobiernos no del todo amigables”.
Para el senador blanco, Montes de Oca es “una embajadora en un gobierno que es notorio que nosotros condenamos y que cada día esta mostrando su peor cara, la verdadera hilacha de la tiranía, el desespero por mantenerse en el poder”.
“No la va a pasar bien y va a ver la peor cara del execrable régimen de Maduro, que cada día es mas inmundo, asqueroso y dictatorial”, concluyó.
El pasado 2 de abril, el Senado había recibido una moción grave y urgente para tratar la designación de Montes de Oca como embajadora extraordinaria en Venezuela. Sin embargo, la votación dio resultado negativo debido a que los legisladores del FA no levantaron la mano, y terminó con 17 votos en 26. Para enviar la venia, la Cámara necesitaba dos tercios de los votos.
“No acompañamos la urgencia de votar una embajadora en Venezuela porque se tienen que cumplir los procedimientos correspondientes”, argumentó el senador del Frente Amplio Daniel Caggiani en el pleno, y agregó que es necesario que Montes de Oca pueda asistir al Parlamento y “presentar los planes de trabajo”.
Por su parte, el senador Luis Alberto Heber consideró vital que la Cámara alta uruguaya, “que sufrió una dictadura en el pasado, tenga presente lo que está pasando en Venezuela”. “En momentos en los que aquí se perseguía gente, se asesinaba gente, se torturaba gente, fue un refugio para muchos orientales”, agregó el exministro del Interior.