El Banco Central del Uruguay (BCU) resolvió este miércoles mantener la Tasa de Política Monetaria en 11,5%, en línea con lo anunciado por el regulador en el encuentro anterior de su Comité de Política Monetaria (Copom).
La institución afirmó mediante un comunicado que “se continúa observando un descenso de la inflación desde el pico de setiembre de 2022” y que las expectativas “han comenzado un proceso de convergencia”.
“En Uruguay, se observa que la sequía ha comenzado a tener impacto sobre la actividad agropecuaria y sobre los precios de alimentos. Se estima que el efecto sobre el nivel general de precios sería de carácter transitorio”, agregó el comunicado.
El BCU también ratificó el “sesgo contractivo de la política monetaria”, algo que en la previa al encuentro fue objeto de críticas por parte de los senadores oficialistas Sebastián Da Silva (Partido Nacional) y Guido Manini Ríos (Cabildo Abierto).
Los legisladores cuestionaron las definiciones de política monetaria del BCU al advertir que genera un dólar “planchado” que afecta la competitividad del sector agropecuario. Mientras Manini Ríos calificó a la política cambiaria como “suicida”, Da Silva señaló que el regulador debería mirar “al mundo real”, en referencia a “estímulos bajistas artificiales”.
El BCU subió en diciembre la tasa de interés en 25 puntos básicos hasta 11,5%, su nivel actual, en lo que fue un ciclo de subas progresivas desde agosto de 2021, cuando la TPM estaba en 4,5%.