Contenido creado por Alejo Piazza
Economía

Más claro, echale agua

Perspectivas económicas de Ceres para 2023: las seis claves para entender lo que se viene

La incertidumbre por el dólar y los lineamientos para la inserción internacional son dos aspectos relevantes, según el centro de estudios.

09.03.2023 10:46

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2023-03-09T10:46:00-03:00
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Montevideo Portal

El Centro de Estudios de la Realidad Económica y Social (Ceres) publicó este jueves en un documento sus perspectivas económicas para el 2023 y presentó seis claves para saber qué va a pasar. La publicación fue lanzada este miércoles en una cena exclusiva para socios en las instalaciones del Club de Golf.

En primer lugar, se menciona qué va a pasar con el dólar. Dicen que es “complicado” anticipar el valor del dólar porque depende mayoritariamente de factores externos y el contexto internacional tiene “enorme incertidumbre”, asociada a la velocidad de la reducción de inflación de Estados Unidos.

“En la medida que la inflación sea persistente y que por ende las tasas de interés de EE. UU. sigan subiendo, es esperable que el dólar se fortalezca a nivel internacional, por lo que tendría que subir en Uruguay, pero si la inflación se desacelera mes a mes, las tasas pueden dejar de subir o incluso bajar y con ello reducir el valor del dólar a nivel global. La verdad es que nadie en el mundo sabe lo que va a pasar”, detalla Ceres, al tiempo que agrega que en Uruguay el dólar está “demasiado bajo” debido a un atraso cambiario que es “malo para el sector productivo”.

Sin embargo, el centro de estudios entiende que no hay que pedirle al gobierno que “haga cosas que no puede hacer”. “Han ingresado muchos dólares al país en el último año entre exportaciones, inversiones, y turismo, lo que reduce el valor de mercado del dólar. Se puede discutir si podría haber una mayor intervención del Banco Central en el mercado de cambios. Pero para ello hay que tener presente que, en Uruguay, la inflación y el dólar van de la mano, y con negociación salarial a mitad de año, no es recomendable tener suba de inflación”, indica.

El segundo punto tiene que ver con la rebaja impositiva del gobierno y si es efectivamente correcta. En este sentido, Ceres está “de acuerdo” con los cambios tributarios “por razones de forma y fondo” ya que considera “muy importante para la confianza de la democracia” que se cumplan con los compromisos electorales, y entiende que el anuncio del gobierno se dirige en esa línea.

Asimismo, la rebaja de impuestos es algo en lo que Ceres viene insistiendo, incluso antes de que se haga la campaña electoral. Por tanto, la reducción del IRPF y el IASS tendrá en los sectores involucrados un impacto sobre el consumo futuro, pero que la pérdida en la recaudación “no se puede medir con un cálculo de servilleta”.

“Existen efectos indirectos que hay que considerar y que van a subir la recaudación de otros impuestos. Ahora, si la preocupación es la sostenibilidad fiscal, este paquete tributario hay que analizarlo en conjunto con la reforma de la seguridad social”, señala.

El tercer ítem tiene que ver con la reforma de seguridad social que está en el Parlamento y a consideración de Ceres se trata de una buena transformación que “resuelve un problema puntual que hay que solucionar”. El organismo reconoce que no se solucionan “todos los problemas del país ni el problema de distribución del ingreso”, pero resalta que no cree que se deban solucionar todos los problemas a la vez.

“Una parte importante del déficit fiscal del Uruguay se debe al gasto en seguridad social, porque no alcanzan los aportes personales y patronales para pagar las jubilaciones. Y no hay espacio para aumentar aportes porque ya se encuentran en valores bastante elevados en comparación internacional”, asegura.

“Se propone que la edad jubilatoria suba gradualmente con el aumento en la esperanza de vida y se plantean incentivos para que sea rentable seguir trabajando. La reforma logra estabilizar en el tiempo el déficit fiscal actual del sistema, que sin reforma es creciente e insostenible en el tiempo”, añade.

La educación, la transformación curricular y qué pasará con ella es el cuarta clave del 2023, pero para Ceres no alcanza con la decisión del gobierno de hacer la modificación, sino que debe existir el compromiso de los docentes para lograr los cambios profundos que se plantean.

Para Ceres, “no caben dudas” de que la propuesta es “buena”, que el país “lo necesita”, pero que el “partido” se juega en el “proceso”: “Tenemos experiencia de buenas reformas educativas que fueron prácticamente revertidas por los docentes. Hay que ir con mucho cuidado, esta reforma es necesaria y urgente, tiene que quedar bien implantada en el sistema. No hay margen para que haya marcha atrás: sería un suicidio colectivo para el futuro del país”, explica.

El penúltimo (y quinto) asunto es la inserción internacional, que a entender de Ceres se puede mejorar, pero “no yendo por un camino que no tiene salida”, y plantea la posibilidad de avanzar en acuerdos comerciales con América del Norte y Europa.

“Con México tenemos un TLC que se puede aprovechar más. Con EE. UU. tenemos una profunda relación comercial en materia de servicios de software y asociados; que el único techo que tiene para crecer es nuestra capacidad de ejecutarlos. Canadá se sumó al reciente acuerdo de cooperación económica que lanzó EE. UU. con países cercanos de la región y que está Uruguay, y es importante también”, indica.

“Con Europa está latente la esperanza de que concrete el acuerdo de todo el Mercosur, en el marco de una relación comercial con una perspectiva que cambió muy positivamente con los acontecimientos bélicos. Y además, se puede aprovechar la excelente marca país que hoy tiene Uruguay. En todos lados”, añade.

Finalmente, el sexto punto tiene que ver con las perspectivas para 2023, económicamente hablando. Para Ceres el año arranca con luces y sombras dado que la sequía está siendo “feroz”, con elevados costos para el agro que son difíciles de calcular, a pesar de eso, la temporada turística fue “mucho mejor” de lo esperado.

Destaca que el 2022 cerró con crecimiento promedio del PIB superior al 5%, pero el crecimiento genuino del año (de enero a diciembre) fue 2% y subraya que los registros para el 2023 son “similares”.

“Recordemos que previo a la caída y rebote de la pandemia, la economía arrastraba 5 años de estancamiento. Después de crecer a tasas récord entre 2004 y 2014, se apagó el motor. Para que se prenda y poder crecer de forma sostenida (y más de 2%) es indispensable procesar la agenda de reformas, que tiene incluida la reforma de la seguridad social y la transformación educativa, pero que no se puede olvidar de actualizar la regulación laboral, mejorar la eficiencia del Estado (incluyendo las empresas públicas) y mejorar la inserción internacional del país”, sentencia.

Finalmente, afirma que ahí se juega el futuro del país, en un partido que “trasciende los tiempos de este gobierno”.

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