Luego de que se filtraran sus audios, la fiscal de Flagrancia Gabriela Fossati solicitó al fiscal de Corte subrogante, Juan Gómez, ser relevada del caso del excustodio presidencial Alejandro Astesiano porque entiende que al divulgarse los mensajes anteriormente mencionados “se genera una nueva situación de tensión a la interna de Fiscalía”, según dijeron fuentes judiciales a Montevideo Portal el domingo pasado.
El periodista Gabriel Pereyra informó en las últimas horas que los audios fueron enviados a Carlos Peláez, periodista de la revista Caras y Caretas, quien dio su versión de los hechos, explicó por qué envió el audio a su colega de Legítima defensa y, entre otras cosas, aclaró por qué no fue una “filtración”.
En diálogo con el medio anteriormente mencionado, el reportero aseguró que los audios dados a conocer no son una “filtración”, sino una “respuesta directa” de Fossati a una “consulta periodística” que le realizó.
En este sentido, explicó que la conoce hace 23 años por su trabajo como fiscal en el departamento de Maldonado, pero aclaró que no son “amigos”. “No tomé café ni me reuní con ella en ningún lugar que no sea Fiscalía”, narró Peláez.
El periodista contó que tiene una relación “amable” con Fossati y que desde que asumió la causa Astesiano no quería molestarla, pero eso fue hasta el 10 de diciembre cuando realizó el primer pedido de relevo. Esa fue la primera instancia en la que hablaron y la respuesta de Fossati fueron los audios que se publicaron este fin de semana.
Asimismo, el periodista afirmó que Fossati en ningún momento le pidió reserva de ningún tipo y que lo que se puede escuchar en los audios son las respuestas a un periodista: “Ella no ignoraba quién era yo, por lo tanto, pasé el audio al director del medio donde trabajo para que definiera su uso”.
“Se resolvió esperar a que terminara la causa para darlo a conocer para no entorpecer la investigación. Quiero aclarar que este no es un audio filtrado, ni la grabé ilegalmente”, concluyó Peláez.
Gabriel Pereyra, en tanto, aseguró que Fossati aclara en una carta enviada a Gómez (en la que pidió el relevo) que su intención es que el audio no tomara estado público y que algunos de los asuntos mencionados en las grabaciones “se fueron solucionando con el tiempo”.
La denuncia que los precede
El director del medio que difundió los audios de Fossati, Alberto Grille, publicó en la edición del pasado viernes una columna de opinión que se titula “Ni difamación ni injurias”, luego de que la fiscal Gabriela Fossati lo denunciara junto con Fernando Pereira y otros usuarios de redes sociales por ese presunto delito.
Grille aseguró que hasta el jueves a las 00:00 horas no sabía “de qué y por qué” se lo denuncia, pese a que la información que maneja es lo que se ha publicado en diferentes medios de prensa.
“Desde ya reitero que no me arrepiento de lo que escribí en esas notas editoriales. Quise escribir estas líneas porque, cuando al parecer he sido objeto de una denuncia penal [de la] que no he recibido notificación alguna, mi abogado —el querido doctor Jorge Barrera— me aconseja escribir con prudencia y sin añadir leña al fuego”, agregó el director del medio.
En ese sentido, aseguró que tiene “la piña prohibida”, pero prevé no “abandonar” a los lectores que lo leen “todos los viernes”. “Como siempre, cuando un funcionario del Estado pretende acallar la voz de un medio de prensa y de un periodista, está en juego la libertad de opinión, la libertad de prensa, los derechos individuales y la democracia”, sostuvo Grille sobre el final del texto.