Los casi diez mil hinchas de Peñarol presentes en el Centenario se hicieron sentir y mucho durante el partido que marcó la eliminación de los aurinegros de la Copa AUF Uruguay a manos de La Luz, algo que además se vio potenciado por las formas.

Los de Ramos habían ganado la ida ante el equipo de Aires Puros por 1-0 y tras un primer tiempo donde mereció más, todo se empezó a complicar en los segundos 45’.

Tras la expulsión de Baeza a los 50’ todo parecía encaminado, pero los minutos pasaron y el gol no aparecía, con un rival del ascenso que mandaba en la cancha con uno menos.

Allí apareció el primer reclamo de los simpatizantes que corearon el tradicional canto de exigencia: “carbonero, un poco más de huevo…”.

Todo eso ganó en candor después del penal que cometió Da Silveira sobre Machado y que convirtió Silva para igualar la serie y forzar los penales.

“Jugadores la c… de su madre”, comenzaba el coro que replicaba en la tribuna y que se cerraba: “a ver si ponen huevo, no le ganamos a nadie”.

Con la derrota en los penales, un golpazo histórico, la rechifla fue generalizada, insultos a Leo Ramos pidiendo su renuncia, otros parciales gritando a los cuatro vientos contra Ruglio y la directiva y muchos que además se dirigieron a las afueras para esperar la salida del ómnibus donde hubo alguna pedrea.

Silencio estampa en la salida de los jugadores, donde Brian Lozano, uno de los que erró en la tanda de penales, se fue con llanto incontenible y la cara de pocos amigos de los integrantes del cuerpo técnico, hacía ver lo pésimo del presente deportivo.

En la era Ramos, de 19 partidos, los aurinegros ganaron nueve, empataron cinco y perdieron otros cinco, ganando 32 puntos de los 57 posibles.

Una nueva noche negra de los carboneros, que no pasaron la fase de la Libertadores sin siquiera llegar a Sudamericana, perdieron el Apertura, Intermedio, Clausura, Anual y ahora Copa AUF Uruguay.