En la tarde del lunes, y mediante juicio abreviado, la Justicia condenó en Paso de los Toros a un hombre que secuestró y violó a una joven de 22 años con discapacidad intelectual.

De acuerdo con el informe de la Fiscalía general de la Nación, el sujeto fue considerado “autor penalmente responsable por la comisión de un delito de abuso sexual especialmente agravado en calidad de autor y en grado de consumado”, por lo que se le impuso una pena de cinco años de penitenciaría.

Asimismo, se lo condenó al pago de 12 ingresos mensuales a la víctima (art. 80 de la ley 19.580) y se decretó la pérdida del ejercicio de la patria potestad y la inhabilitación para el ejercicio de funciones públicas o privadas en el área educativa, de la salud y todas aquellas que impliquen trato directo con niños, niñas y adolescentes, personas con discapacidad y personas mayores en situación de dependencia (art. 79 de la ley 19.580) por un plazo de diez años.  

La víctima, llamada Morelia, había sido llevada por el condenado a su domicilio, donde, según el resultado de los informes periciales, fue abusada por este. Al recibir la denuncia de la madre, la Policía identificó el vehículo en el cual había sido llevada y localizó el domicilio del imputado, donde ingresó con autorización del dueño de casa y encontró a la joven, a quien se le constataron lesiones.

Descontento popular

Los vecinos de Paso de los Toros siguieron de cerca el caso, y se concentraron ante la puerta del juzgado en espera del resultado de la audiencia. Tras conocerse el fallo, familiares, allegados y vecinos no ocultaron su descontento ante un castigo que consideraron asaz insuficiente.

Tras el dictamen, un nutrido grupo de isabelinos marchó hasta la casa del condenado, identificado como Gustavo Andrés Franco, y allí manifestaron su disconformidad con el castigo impuesto.