Tanto el Partido Nacional como el Frente Amplio (FA) emitieron en las últimas horas declaraciones de condena por el asesinato en Ecuador del candidato presidencial Fernando Villavicencio, que fue víctima de un atentado el miércoles a la salida de un acto de campaña.
El Partido Nacional expresó que el asesinato “socava y atenta contra los cimientos mismos de la democracia” y exhortó al gobierno de Ecuador “a que tome las acciones necesarias para salvaguardar la seguridad de los actores políticos, periodistas y líderes sociales que desempeñan un papel crucial en el escenario democrático”.
“La preservación de la pluralidad de voces y el respeto por las diferencias son elementos fundamentales de una democracia vibrante y deben ser protegidos sin excepción alguna”, agregó la declaración.
El Partido Nacional también realizó un llamado para que todas las fuerzas políticas, la sociedad civil de Ecuador y la comunidad internacional “se unan para defender los principios democráticos y el estado de derecho”. “Enfrentar la violencia con determinación y mantenernos firmes en la promoción de la tolerancia y el respeto por la ley es vital para salvaguardar la paz y la democracia en nuestra región”, señaló el escrito.
Por su parte, el Frente Amplio, en su declaración de condena, expresó que “este lamentable atentado es consecuencia de una crisis generalizada” que atraviesa Ecuador y que, según advirtió la fuerza política, “viene siendo denunciada desde hace meses”.
“Nuestra fuerza política llama a la serenidad entre los ecuatorianos y exige que el Estado garantice que el próximo proceso electoral se desarrolle en un clima de tolerancia y respeto”, afirmó la fuerza política.
El Frente Amplio además realizó “un llamado a todos los sectores progresistas y de izquierda a la máxima unidad para que, junto a las y los ecuatorianos, logren construir los marcos de convivencia que permitan superar esta crítica situación y caminar hacia un futuro de paz, prosperidad, igualdad y justicia”.
El asesinato
El asesinato a balazos el miércoles de Villavicencio, que semanas atrás había denunciado amenazas de muerte en su contra, conmocionó a Ecuador en medio de la campaña electoral para los comicios generales extraordinarios del próximo 20 de agosto.
Un grupo de colombianos ha sido señalado por la Policía de Ecuador como presunto autor material del asesinato de Villavicencio.
Candidato de los movimientos de centro Construye y Gente Buena, y que había denunciado la semana pasada amenazas contra él y su equipo de campaña, Villavicencio murió al ser baleado cuando abandonaba un polideportivo en el norte de Quito después de encabezar un acto de campaña.
El periodista y exasambleísta era uno de los ocho inscritos para suceder a Guillermo Lasso en el sillón presidencial.
La campaña ya giraba desde antes del homicidio en torno a la crisis de seguridad que atraviesa el país, con recurrentes asesinatos, matanzas y motines carcelarios por parte de bandas del crimen organizado, a las que el candidato había prometido combatir.
El presidente ecuatoriano Lasso, que ratificó la realización de los comicios en la fecha en que estaba previsto, decretó el estado de excepción por 60 días para el despliegue de efectivos militares en todo el país.