Actual coordinador de la OPP, Pablo Álvarez surgió en las últimas horas como uno de los candidatos a presidir el Frente Amplio.

"Para mí es un reconocimiento importante que algunos compañeros hayan pensado esta posibilidad", expresó en diálogo con Montevideo Portal y dijo que, por su compromiso con la militancia en todos los niveles, está "dispuesto eventualmente a asumir". "Ahora, para que eso suceda todavía esto está bastante verde", agregó.

"Hoy lo que está comenzando es una discusión que se inicia públicamente a partir de la aparición de nombres, pero que debe desembocar en cuestiones más relevantes en las que tenemos que aportar a la discusión", reflexionó Álvarez.

Consultado sobre lo que debería cambiar en el Frente Amplio a futuro, Álvarez destacó que es necesaria una "fuerte discusión interna" que "ponga a tono" al partido después de más de diez años en el gobierno. "Todas las fuerzas estuvieron puestas en hacer desde el gobierno lo mejor, y quizás fuimos descuidando la fuerza política y en eso hay una responsabilidad de todos", valoró.

"Entramos en una etapa en la que creo que el Frente Amplio debe asumir un rol de promotor de debates de largo plazo que escapen a la coyuntura en la que se ve puesto el gobierno, y que salga a dar una batalla cultural y de ideas en el terreno cotidiano y humano de la política, que a veces el gobierno no puede", apuntó.

Álvarez hizo énfasis en la necesidad de poner al Frente Amplio "en el sendero de una participación fuerte" en los debates internos, en la elaboración de las propuestas y en la toma de decisiones pero, sobre todo, "en el campo de la cotidianeidad política".

"La política es de todos los días y no cada tanto tiempo para ganar o perder una elección", destacó.
Finalmente, Álvarez se refirió a las discusiones de la interna del partido que se expresan a través de los medios de comunicación. "Para poder mitigar esas discusiones hay que fortalecer y reconocer la capacidad de la fuerza política para asumir esas discusiones", expresó.

"Por un lado, asumir que la fortaleza del Frente Amplio es la diversidad que tiene y por lo tanto el disenso natural ante cualquier discusión y la capacidad que tiene para ponerse de acuerdo. Y en segundo lugar asumir que, para las transformaciones que son posibles hoy, adentro del Frente Amplio no sobra nadie, pero que para las transformaciones que entendemos necesarias todavía sigue faltando mucha gente que se acerque y se vincule con nuestro Frente Amplio", concluyó.