Por GERARDO TAGLIAFERRO

El año pasado, mientras se disputaban los Juegos Olímpicos, viajó a Europa y a dos días de llegar, en Barcelona, le robaron todo. Se quedó sin pasaporte, sin el carné de periodista que le había dado la radio para la que trabaja y sin plata. Pensó en volverse pero rápidamente desistió: no iba a abandonar el viejo mundo sin conocer París. Entonces se mandó a cruzar fronteras y llegar a Inglaterra munido de lo único que le quedaba y suponía le podía dar resultado: su buen humor.

Arribó a Londres, luego de pasar por París como quería, haciéndoles chistes a los funcionarios aduaneros y pidiéndoles que googlearan su nombre para mostrar que no era un terrorista becado por Al Qaeda en los Juegos sino un "periodista" uruguayo golpeado por la mala suerte.

Es probable que ese éxito haya tenido que ver en su decisión de lanzar un partido político, con el que piensa candidatearse a la presidencia el año próximo, y que llamó "Viva la vida". Algunas de las ideas fuerza que lo guían no están muy distantes de las razones que le ganaron la confianza de los aduaneros franceses e ingleses: si éstas traspasaron barreras tan herméticas, aquellas pueden colarse en la agenda electoral.

Ese es su declarado propósito: meterse como una molesta piedra en los zapatos de los competidores del año próximo, captando la atención hacia temas como la necesidad de construir una sociedad de amigos basada en la confianza mutua o rodear de afecto y no de rejas a los que se equivocan.

Hay que decir algo: salvo en su círculo más íntimo -al menos eso supongo- nadie se anima a decir si esto va realmente en serio o si es un latigazo más de su humor absurdo. Cita a Alejandro Dolina y dice que "hacer humor es poner las cosas donde no van" y si hay algo que claramente no va es, en este país, un candidato que proponga una campaña sin jingles, sin eslóganes, sin estrados y que postule "una sociedad de puertas abiertas, donde ya no se precise castigar, ni encerrar ni encerrarse" o en la que "no haya educadores o educandos sino que todos nos estemos enseñando permanentemente".

Más allá de su partido, Pablo Aguirrezábal entra en esa categoría difícil de encasillar: ¿comediante? ¿actor? ¿libretista? ¿murguista? ¿músico? Un poco de todo eso y mucho más. Fue puntal de La Mojigata, uno de los títulos importantes surgido de la "murga joven", hace stand-up, escribe, crea música, participa en programas radiales y en su casa -donde como en el humor las cosas parecen estar donde no van- flamea una bandera del Frente Amplio.

No se sabe aún si será arriada para izar la de "Viva la vida", entre otras cosas porque el nuevo partido todavía no tiene existencia legal. Por ahora es la ilusión de alguien que podríamos catalogar de "loco lindo", y que no es un loco de la guerra, es un loco de la paz.

1) ¿En qué está la concreción del partido "Viva la vida"?
En este momento estoy juntando firmas para poder inscribir el partido en la Corte Electoral y cruzando los dedos para que la Corte me las acepte.

2) ¿Por qué cruzás los dedos? ¿Qué puede pasar?
Te pueden tirar para atrás por cualquier cosa. Lo que quiero es llegar a candidatearme, después no me importa más nada lo que pase. Pero ese primer paso tiene que darse y en este momento lo único que vislumbro que puede impedir eso es que la Corte me diga que no por algo: por la Declaración de Principios o por la Carta Orgánica o algo de eso, los estatutos también, cómo se organiza el partido. Pero eso es todo muy libre: mi partido soy yo y el que quiera venir, una cosa así. Esto es algo muy personal, no por ser ególatra ni personalista, sino simplemente por poner en el debate algunos temas que creo que no están.

3) Y creés que para eso tenés que entrar en el juego electoral.
Me están tomando en serio, por ejemplo. Yo digo estas cosas por muy diversos lugares, pero se ríen. Y me interesa que sientan que, más allá de que yo lo digo con alegría o con humor cuando hablo del amor o cuando digo que la educación tiene que ser distinta o que deberíamos creer más en el otro, estoy hablando en serio. Que lo sientan como una propuesta política específica o posible.

4) ¿Hasta cuándo tenés tiempo?
Hasta fin de año. Antes del 2 de enero tengo que presentarlo. Pero no pienso hacer nada ni el 31 de diciembre ni el 1° de enero (se ríe).

5) Te voy a confesar algo: cuando escuché que vos largabas este partido pensé que era en broma. Después te escuché en varios reportajes y vi que, aparentemente, va en serio. Ahora, te confieso que te tengo un poco de desconfianza y me pregunto: ¿este tipo no estará haciendo un experimento con todos nosotros? ¿No seremos conejillos de indias de un experimento que es: larguemos esto y veamos qué pasa?
Ayer justamente estaba pensando algo de eso. Me interesa mucho que pensemos el Uruguay del futuro. Yo sé que todo el mundo dice esto, pero realmente me interesa que pensemos qué sociedad queremos. Tal vez en lo que discrepemos con los grandes políticos o tecnócratas que llevan adelante el país es en qué país realmente queremos. Yo quiero un país distinto. A mí me parece realmente que va bien el país, pero me interesa un país donde todos seamos amigos, donde no estemos pensando en meter rejas, etc. Me parece que está interesante revolver el sistema político. Yo soy provocador, escribo sin "h" por ejemplo, simplemente para jugar, para que nos imaginemos que pueden venir otras cosas. Puede venir un banana que parece muy loquito y muy volado y proponer otras cosas y que mucha gente diga: "pah, estará fumadito pero está interesante lo que propone".

6) ¿Hay más gente conocida que esté trabajando contigo en esto?
No, no, estoy solito. Mi idea es: estoy lejísimos de llegar a pensar que puedo ser presidente, pero como sería candidato, en el caso que fuera presidente yo armaría grupos de laburo con gente de muy distintos lugares. No tienen por qué ser políticos pero sí gente que esté dispuesta a repensar la educación como si la viéramos desde Marte y pensáramos cómo deben educarse los seres humanos. Pero además grupos en los que se piense el día a día también. El Uruguay del futuro pero también las medidas que tenemos que tomar hoy para ir llevando la sociedad hacia ahí.

7) ¿Qué dice la gente que te rodea sobre esto?
Muy distintas cosas. Primero, mis amigos principalmente y los seres con los que siempre me doy, confían muchísimo. Últimamente he sentido un cariño y una confianza increíbles y me abrazo a eso. No abuso de eso porque sé que simplemente fui un adolescente que empecé a tener sensibilidad por las cosas del mundo y la gente empezó a sentir que era veraz lo que estaba rascando.

8) Tengo un amigo que te sigue mucho y le gusta lo que hacés, y le pregunté si cree que hablás en serio de todo esto o es todo broma. Y me contestó: "Es imposible saberlo. El tipo es un crack y está loco además". ¿Estás loco efectivamente?
Y, depende de la definición de locura. Si es que por la cabeza te pasen otros mundos que no encajan en el tic tac del mundo rutinario, sí. Pero realmente siento que domino mi cabeza, no es una cabeza que salte porque tiene un problema. De vez en cuando me pongo mal y lloro o tengo ganas de gritar y esas cosas, pero le pasa a cualquiera. La sociedad en que vivimos es muy contradictoria, muy loca ya, entonces es natural que te pasen esas cosas.

9) En la puerta hay una bandera del Frente Amplio. ¿Esto es una ruptura?
No. Sí con la decisión de los principales sectores del Frente de candidatear a Tabaré Vázquez. Yo aprecio mucho lo que hizo Tabaré pero volver a él me parece que es un retroceso, creo que hay que ir más hacia la izquierda se podría decir. Más hacia lo social. Me parece que él juega a cosas que yo no entiendo y con las que no estoy de acuerdo. Pero por otro lado me gusta mucho Constanza (Moreira) por su pensamiento sobre los derechos humanos, esto de ir sacándole recursos a las Fuerzas Armadas, por ejemplo. Pensar en guerras a mí me parece muy raro, muy extraño. No me representa una persona que piensa en guerra.

10) Con Mujica estás bastante en sintonía.
Sin duda. Me parece que es conservador, que es un viejo que se le va la boca muchas veces, pero lo amo. Me parece un tipo muy querible y que es un filósofo de los que a mí me gustan.

11) ¿No te preocupa que la gente te vea como otro Pinchinatti?
Bueno... lo que siento últimamente es que no me está quitando el sueño lo que interprete la gente... No sé si no me está quitando el sueño, lo que quiero decir es que realmente esto no lo hago para que la gente se crea una cosa, sino básicamente para movilizarnos sobre estos temas. Hay mucha gente que quiere repensar la política, algunas actividades de la sociedad donde la mentira por ejemplo es legítima. Todas esas cosas las voy a decir lo más auténticamente posible. No voy a tener jingles ni logos, no voy a gastar energía en publicitar nada y no va a haber un estrado donde yo dé un discurso. Lo mío es pelotear, siento que realmente tengo muchos agujeros en cuanto a lo que pienso y muchas más dudas que certezas. A mucha gente le va a costar confiar en mí porque justamente le estoy diciendo que tengo más dudas que certezas, cuando los políticos tradicionales le dicen que ellos son pura certeza, no tienen ni media duda. A mí me parece extrañísimo porque si hay algo que tiene el ser humano son dudas. Además yo soy socrático, me gusta dudar porque ese es el trampolín para seguir aprendiendo.

12) ¿A dónde pensás llegar?
No sé, esto fue medio de repente. Yo estaba de gira por Argentina y un día se me ocurrió, en la ducha seguramente que es donde se me ocurren las cosas, y dije: claro, es muy interesante. Me sentí fuerte para exponer y eso es importante porque la exposición a mí me pone muy nervioso. No me gusta ser famoso, realmente me gusta estar con la gente que quiero, no quiero ningún pedestal. La exposición es brava, pero me siento fuerte para exponer en materia política.

13) ¿Y en qué sentís esa fortaleza?
Básicamente estoy convencido de que tenemos que ser amigos entre todos y tirar todos para ahí. Que no hay buenos y malos sino que hay gente que hace buenas cosas y otra que hace malas cosas, pero hay que ayudarla a intentar convivir y no competir permanentemente.

14) Imaginemos que salís diputado. ¿Has pensado cuál sería tu primer proyecto de ley?
La verdad... me he imaginado la posibilidad de ser diputado y me cambiaría mucho la vida. Pero no pienso cambiarla porque yo estoy re tranquilo con mi guitarra, con la mujer que quiero mucho, con mis hijas, quiero disfrutar mucho del aire en la cabeza, de pasar días sin pensar en nada, sin que la rutina me atrape. Entonces, si llego a salir diputado tengo que saber bancarme mi forma de ser, que es la que me da también espacios para pensar cosas distintas. La rutina te encaja en un caño que te olvidás.

15) En la política después tenés que aterrizar las ideas. Decís: no quiero que la gente viva enrejada. Muy bien, eso ¿qué quiere decir? ¿Qué vas a impulsar una ley que diga "desenréjense todos"?
No, de ninguna manera. Por lo pronto yo armaría un grupo de trabajo porque no creo tener la posta. Lo que sí creo es que la educación tiene que ser distinta, entonces llamaría a gente que está convencida como yo que la educación tiene que ser abierta. No podés apurar al niño a que sepa algunas cosas sino que lo tenés que dejar que experimente. También me gustaría ayudar a que la gente viaje, que la gente del interior conozca el mar, por ejemplo. Que todos vean cosas distintas y que se den cuenta que las cosas pueden hacerse de otra forma. Viajar debería ser una de las actividades primarias del hombre.

16) ¿Es cierto que en algún momento les dijiste a tus hijas, de 8 y 12 años, que si querían dejar la escuela la dejaran?
Sí. Claro que mis hijas son excelentes alumnas, excelentes compañeras, son tremendas las dos. Vaya a saber si lo hubiera dicho si no fuera así, pero sí las ayudaría a encontrar su pasión. La escuela a veces destruye pasiones.

17) Eso es una herejía para lo que uno está acostumbrado a pensar.
Sí, claro, más ahora que te dan premios por llevar a tus hijos a la escuela. Lo que pasa es que la escuela... todo bien con ser uruguayo, a mí me encanta, yo grito los goles de Cavani y todo, pero me parece que se gasta mucha energía en hablarte de patria o muerte, como dice el himno. Realmente eso para mí es muy extraño. Los adultos tenemos una forma de enseñar como si realmente tuviéramos la posta y se la pasáramos a los niños, cuando en realidad venimos trayendo el mundo a cascotazos. Habría que escuchar muchísimo más a los niños. También me parece que eso de echar a un niño porque se porta mal en la clase... con eso les estás demostrando que en los grupos, el que no encaja, va para afuera. Y eso está mal, si se porta mal ayudémoslo, pero él es parte del grupo, no lo saquemos. El competir con los compañeros y los amigos por notas, a ver quién es mejor, a mí me parece repudiable y estoy convencido de que hay que cambiarlo.

18) ¿Has sido un militante político?
No tanto, fui a los festejos (se ríe). Pocas veces me sentí militante.

19) Si hubieras tenido 20 años en 1968, ¿dónde crees que habrías estado: haciendo la revolución o con los hippies fumando un porro en la plaza?
Depende. ¿Con la cabeza que tengo ahora o con la de los 20 años? Porque a los 20 años yo me enojé mucho con lo del (hospital) Filtro, por ejemplo. Y tenía unas ganas de ir y dármela contra los caballos que ni te digo. Pero ahora me parece que la agresión es... veo cosas del Che o de gente de izquierda que luchó por medio de la guerrilla, hasta mismo pienso en Artigas, y pienso que los tipos se equivocaron. Yo tengo un baño chico que está lleno de frases, y no sé de quiénes son, cada uno escribe, y hay una que es preciosa que dice: "No hay camino para la paz, la paz es el camino". Me parece que los guerrilleros se equivocaron, no es la forma. Me podés decir: "Pero si no lo hubiéramos hecho no conseguíamos nada". No lo sé, no lo hiciste de otra forma, Gandhi consiguió muchas cosas.

20) Mujica quizás no sería presidente hoy si no hubiera hecho lo que hizo hace 40 años.
Claro... claro, sin duda. Sí, yo me di la cabeza contra muchas paredes, si no lo hubiera hecho tampoco sería como soy ahora.

21) Ha habido en otros lugares experiencias como la que vos querés llevar adelante, de enfrentar al sistema desde dentro, que fracasaron. Te enfrentás a un enemigo muy poderoso.
Sí, lo tengo claro. Me voy a poner bastante nervioso a la hora de enfrentarlo porque soy mantequita y porque cualquiera se pone nervioso enfrentándose a ese monstruo. Pero hay otra frase que me gusta mucho: "Si no te sigue nadie, caminá solo". Yo necesito expresar, y necesito que mi sociedad y el país que quiero muchísimo se ponga a pensar en estas cosas. No necesito medallas ni nada, porque me parece que mi vida está tirando más para un pueblo de pescadores que para estar en la ONU.

22) Hace poco dijiste: "Hay que estimular a los locos lindos por encima de los que piensan en ganar plata y premios". Pero cuando alguien se sube a un escenario, como vos hacés, está buscando el aplauso.
Sí, sin duda. Pero es una comunicación, es como estar con un amigo y que el otro hable contigo. Pero hay distintos tipos de humor, está el ingenioso, el que busca algo en tu cabeza que no esperabas, el sorpresivo. Dolina dice que el humor es poner las cosas donde no van. Pero hay otro humor que es el fiel, digamos. El de las hinchadas de carnaval, o el chiste sobre Nacional que busca que te rías porque sos de Peñarol. Ese no me gusta. Lo que yo no quiero es ir a buscar el aplauso condescendiente.

23) Por eso no te has metido en el humor político, que has dicho que no te sale.
Sí, no me sale. Y hay humores políticos que no solo no me salen, sino que me duelen. Igual me parece que es una cosa que voy a tener que aprenderla y reírme de todo. Por ejemplo: hacer un personaje que estuvo en una guerra o una cosa así debería ser más absurdo. Un personaje que sea realista me va a costar, porque trasladás tu cabeza para ahí y decís "uhh"... Entonces, debería ser por el absurdo.

24) Humanidades, Sociología, Ciencia Política, Historia, Derecho, Relaciones Internacionales, Comunicación, Cine, Bellas Artes... ¿todo eso estudiaste, en serio?
Todo eso, poquito. Algunos meses. Pero creo que buscaba otras cosas que no me las daba la carrera: interactuar con gente y conocer de qué se trataba. Yo siento que me meto en algo un par de años y más o menos le saco de qué se trata, hasta ahí aprendí y cambio, voy para otro lado a aprender de eso otro.

25) ¿Sos un producto de La Mojigata?
Hay algunas cosas que aprendí de La Mojigata, como hacer humor. No las aprendí, un día me animé a hacerlo, salió bien y a partir de ahí empecé a hacer humor. Y otras cosas más filosóficas, por ejemplo escuchar al más callado más que al que grita.

26) ¿Por qué decís que eso lo aprendiste en la murga?
Porque era parte de la forma de ser de la murga. Siempre ganaba el más calladito, lo que votaba el más callado era lo que ganaba, se desconfiaba mucho del que gritaba. No sé si es bueno o malo, por lo menos está interesante que sea distinto a lo que siempre se da: que el que más habla sea el que termina llevándose la torta.

27) A muchos nos costaba entender lo que intentaba trasmitir La Mojigata, que en buena medida eran textos tuyos.
Creo que La Mojigata tenía como dos cabezas: una que quería hacer una cosa y otra que estaba en la realidad de un concurso en un tipo de formato artístico que era la murga tradicional. Entonces chocaban. A veces se sentía muy sensible La Mojigata, muy buena, si fuera una persona sería bondadosa, altruista, pero por otro lado era absolutamente egoísta, perversa en sus formas de pensar en el otro. Esa contradicción que tenemos todos.

28) Te doy un nombre y te pido un comentario: Carlos Tanco.
A Carlos lo admiro como... no sé si se llama artista o qué, pero lo que escribe el tipo y la forma en que maneja a Darwin Desbocatti es increíble, pero además de eso es un tipo que me ha cuidado muchísimo. Es el primero que me dio verdaderamente trabajo y me sigue dando, que ha hecho que yo labure y me cuida increíblemente. Siento que es un padrino, lo quiero muchísimo.

29) Hay una anécdota sobre un viaje que hiciste a Europa y en el que perdiste todos tus documentos, que involucra a Tanco ¿verdad?
Sí, el año pasado fui a Europa y ni bien llegué, a los dos días, me afanaron en Barcelona. El pasaporte italiano, los documentos, plata. Al principio dije: ta, me vuelvo con mis hijas. Pero después dije no, me quedo porque en París voy a pasar bien, hace calor, me tiro en cualquier lado. Siempre quise ir a París y estaba a metros, y estaba ahí Londres, los Juegos Olímpicos, sabía que había una amiga también e iba a estar Carlitos. Y él realmente es un colchón y confía mucho en mí. Y me llevaba a las reuniones de inauguración de las Olimpíadas, lugares así, y caminamos y hablamos mucho.

30) ¿Y cómo hiciste para moverte sin pasaporte y sin ningún documento?
En las aduanas convencía a los de la frontera que me tenían que dejar pasar. En Francia le hablé mucho al militar francés y en Inglaterra, en la frontera, les pedí que me googlearan. Y después me pidieron que hiciera un chiste, llamaron a mi amiga en Londres, y así me dejaron pasar.

31) O sea que entraste a Francia y a Inglaterra sin documentos, solo hablando.
Sí, tenía un papel que decía que me habían robado el pasaporte, ojo. Eso es muy importante, y también que no era ni negro ni árabe. Por ser blanco pasás mucho más rápido, hubo otros que sí los bajaron y no pudieron cruzar. Yo iba re tranquilo, porque si pasaba estaba bien y si no pasaba también. La iba a pasar bien en cualquier lado, me sentía muy bien.

32) ¿Ibas solo?
Iba solo sí. Así que eso también los hizo desconfiar. Creo que en la frontera les dije: "Miren que si yo me quedo acá en Calais, estoy bárbaro... pero... dejame. Yo laburo de periodista -no tenía ni el carné que me habían dado en Océano- y necesito cruzar para trabajar. Te estoy pidiendo por favor que me dejes cruzar. ¿Qué voy a hacer yo? Mirame..." Cosas así, y así se van convenciendo.

33) Eso es un pequeña demostración de que alguna de las cosas que planteás en la política, se pueden.
Ah bueno, puede ser sí. Estoy totalmente seguro, y es así, sí. El mundo debería ser mucho menos normativo y burocrático. ¿Te pasa algo? Tenés que confiar. El armatoste que tenemos en torno a la seguridad es tremendo, tenemos que confiar un poco más en el otro.

34) ¿Por qué subiste a recibir el premio Iris que era para Darwin Desbocatti?
Carlitos (Tanco) lo llamó a Rafa (Cotelo) y le dijo que quería que yo subiera. Él no estaba, no va a esos lugares. Y yo subí lo más contento. Es como que a toda esa farándula grandota de la tele y a todo eso también le he restado importancia. Subí ahí y les dije para cantar una, lo primero que me salió, y me hubiera encantado cantar una entre todos.

35) ¿Cómo es vivir sin celular?
Ah, yo estoy mucho mejor, aunque se me complica. Esta semana robé varios sms, pero ya me prometí que no lo puedo hacer porque es como el que deja de fumar y después anda pidiendo pitadas. Y estoy bárbaro. Por supuesto que hay cosas que se me complican, me he perdido varias veces en Solymar y en esos lugares, no sé para dónde agarrar. Pero ta... tengo que salir con un mapita.

36) ¿Cuál fue el clic que te hizo dejar de usar celular?
Bueno, estaba perdiendo uno tras otro, y cada vez más caros. En Barcelona se me perdió uno y en noviembre o diciembre pasado se me perdió otro y sentí que estaba como en las nubes. Escuché en estos días algo del sentimiento que tuve en ese momento: estaba tan conectado que estaba incomunicado. Estaba re conectado con todo pero sentía que no tenía la comunicación que quería, estaba todo el tiempo piqui piqui (simula teclear en un celular), a puro sms. La verdad que me liberó, me ayudó a agarrar más la guitarra, a pensar más tranquilo y a leer mucho más. Y estar atento a la hora. Antes no estaba atento, estaba esclavo de la hora. Como dice Cortázar: yo, como tantos, era un regalo para el cumpleaños del reloj. Entonces, ahora estoy atento a la hora.

37) ¿Tuviste problemas con el alcohol?
Sí, yo creo que sí. Cuando descubrí el alcohol lo sentí como un amigo, que me abría otras puertas que no podía abrir por otro lado. Pero creo que el alcohol es dañino, está bueno tomarlo en muy pequeñas cantidades, en algunas circunstancias. Esta casa se llama "El dulce abismo", creo que en realidad todos buscamos ese pozo en que te reventás, que tocás fondo, para aprender. Mucha gente lo agarra en la rutina, en la monotonía o en otras cosas que parecen mucho más normales y en realidad te estás castigando igualmente: el miedo, la inseguridad, el pelearte con tus seres queridos. El alcohol es una forma más. Y el año pasado sentí que estaba cantando mucho mejor sin alcohol y me empezó a gustar despertarme sin él. De vez en cuando, es re lindo, pero cuando te agarra, te agarra, como todo en la vida.

38) Algunos tips de los que estás tirando en el marco de tu nueva faceta política suenan muy cristianos: solidaridad, amor, paz. ¿Hay algo de eso?
Yo no soy para nada cristiano pero lo de Jesucristo me encanta. Creo que era un hombre común y corriente, la gente se encontró con que el tipo estaba muy iluminado por dentro, y para mí Dios es cada uno. Sí, tiene mucho de Jesucristo, muchísimo, ahora de la Biblia poco, porque esto de los mandamientos... es muy raro, principalmente porque ellos no los cumplieron.

39) ¿Creíste en Dios en algún momento?
Bueno, pero porque no sabía que existía la posibilidad de no creer (se ríe). Me formé en un hogar creyente con el que estoy muy enojado. A mi madre, pobre, a veces le caigo mucho con que ella vivió en una familia muy cristiana y que se olvidó de serlo. Me parece muchas veces que es increíble que hablen tanto de Cristo, vayan a misa y se olviden de lo que Cristo proponía.

40) Hablabas de Sócrates y de la duda como motor del aprendizaje. ¿Cuál es tu principal duda?
(Piensa) Esa la tengo que pensar... mi duda mayor, algo que me quite el sueño resolver... por suerte dejó de ser creer en mí. Y dejó de ser que yo sea un iluminado de nacimiento. Soy uno más que de a poquito fue buscando respuestas y llegó acá. Ah bueno... tengo una sí: no estoy del todo seguro si realmente antes de que muera vamos a lograr vivir en un mundo sano, pero creo que es posible. Confiemos en la medicina (se ríe).

Montevideo Portal / Gerardo Tagliaferro
Fotos: Juan Manuel López
Por comentarios: tagliaferro@montevideo.com.uy