La Asociación de Trabajadoras Sexuales del Uruguay (Otras Uy) emitió un comunicado este domingo para referirse al caso de 17 mujeres que eran víctimas de explotación sexual en Centenario, en el departamento de Durazno.
Doce de las víctimas eran de nacionalidad uruguaya y cinco, extranjera: dos venezolanas, dos dominicanas y una cubana.
El dueño de la whiskería City Night fue imputado como viernes por la fiscal Alicia Ghione como presunto autor de “reiterados delitos de trata de personas en la modalidad de explotación sexual con un delito de armas y municiones”. Se le dictaminó prisión preventiva por 120 días.
Por su parte, Otras Uy expresó que es “primordial” para el sindicato “solicitar a las autoridades nacionales y departamentales” que se extremen los cuidados de las víctimas.
En el comunicado se reclama “pronta solución al tema habitacional y de alimentación mínima de las compañeras que dicho local trabajan, amparadas en el artículo 19 de la ley 19.643”, que establece servicios y prestaciones mínimas para las víctimas de la trata y la explotación de personas.
En este caso, se pide “seguridad y asistencia material básica y alojamiento seguro y adecuado”.
“En caso de que lo rechacen que quede constancia, pero se les asegure un sustento mínimo vital como garantía del debido proceso”, se afirma en el documento que menciona también el artículo 3 de la misma ley, que establece como “prioridad los derechos humanos de las víctimas”.
“Los derechos humanos de las víctimas deben ser el centro de atención en todas las intervenciones y su protección debe priorizarse frente a otras acciones como la investigación y persecución de los tratantes y explotadores”, señala el inciso b del artículo 3 de la ley 19.643.
Otras Uy solicita además que se habilite “un equipo de acompañamiento psicosocial en la localidad” para que responda a “todas las inquietudes que invaden a las compañeras en estos momentos de zozobra sobre su estado de situación, para evitar que incurran en acciones que luego las pondrán en mayor exposición”.