Así, Países Bajos, Bélgica, Italia, Alemania, Francia, Irlanda, Austria, Portugal, República Checa y Bulgaria han anunciado medidas excepcionales para impedir la entrada de la nueva variante.

El primer país en anunciar el cierre de fronteras ha sido Países Bajos, al que han seguido con la cancelación de vuelos Bélgica, Austria, Francia, Italia y Suecia. Alemania también ha restringido los vuelos y solo permitirá los transportes de carga.

"Reino Unido ha dado la alarma sobre una nueva forma de COVID que sería el resultado de una mutación del virus. Como gobierno tenemos el deber de proteger a los italianos", ha explicado el viceprimer ministro Luigi di Maio en un mensaje publicado en Facebook.

En el caso de Irlanda, el Gobierno ha suspendido durante 48 horas tanto los vuelos como las comunicaciones marítimas a partir de la medianoche del domingo al lunes tras un encuentro de los tres partidos que participan en la coalición de gobierno.

En respuesta al pico de contagios, el Gobierno británico anunció el sábado nuevas restricciones para Londres y el sureste de Inglaterra, las zonas más afectadas. El domingo, el ministro de Sanidad británico, Matt Hancock, reconocía que la nueva variante de coronavirus "está fuera de control".

La nueva variante también fue identificada en países como Dinamarca, Holanda, Sudáfrica y Australia y dada su gran capacidad de contagio es probable que surja en otros países.

Con información de Europa Press