No es “porque sí”: se supo la trama del “inexplicable” atentado de una mujer en shopping

La policía carioca considera aclarado el caso de la explosión e incendio de un local en un shopping en Campos dos Goytacazes, en Río de Janeiro.

Tal como informamos, el incidente ocurrió el pasado 4 de febrero y dejó a varias personas heridas. Se hizo viral debido al registro de una cámara de vigilancia. En dicha filmación se aprecian las idas y venidas de la presunta atacante dentro del centro comercial, así como los movimientos de la dueña del local damnificado, imágenes que evidenciaban que esta última conocía a la primera y temía algún tipo de agresión.

Las desavenencias entre ambas mujeres habrían comenzado a principios de 2024, cuando —según la comerciante— ella atendía un puesto de venta callejero y fue atacada a golpes e insultada por la mujer que esta semana incendió su local.

Kesia Monteiro, la comerciante en cuestión, dijo días atrás en una entrevista televisiva que su único contacto en persona con la agresora —llamada Daiana— había sido en aquella ocasión hace un año. Aseguró también que desde entonces había sido objeto de insultos y amenazas virtuales de la mujer, y sostuvo que desconocía las razones de ese encono hacia ella.

Interrogada acerca de rumores “en redes” sobre un presunto romance con el compañero de la agresora, Monteiro lo negó de manera enfática. “No la conozco a ella, menos al marido”, manifestó entonces. Sin embargo, las pesquisas policiales demostraron la veracidad del refrán que sugiere que “cuando el río suena, agua trae”.

Carla Conceição Guimarães Tavares, comisaria a cargo de la seccional de Campos dos Goytacazes, brindó pormenores del caso.

“Las dos mujeres tienen a sus maridos presos por delitos de narcotráfico. La víctima visitaba a su pareja y la sospechosa afirma que durante esas visitas ocurrieron traiciones”, dijo en declaraciones recogidas por el portal noticioso G1, en las que detalló que la atacante ya fue detenida y se encuentra bajo custodia policial. Así las cosas, la incendiaria estaría al tanto de que Monteiro hacía “visitas dobles” al penal, y decidió vengarse.

La uniformada señaló que la detenida ya había proferido amenazas de muerte contra Monteiro, y enfatizó que actuó sin medir las consecuencias que su atentado tendría contra otras personas. “Dijo que iba a incendiar el establecimiento comercial y que donde estuviera la encontraría”, contó la comisaria.

La funcionaria recordó que entre los heridos hay un hombre de 78 años que aún se encuentra grave, y también mencionó las pérdidas sufridas por los comerciantes del establecimiento.

“Además de las víctimas del intento de homicidio, tenemos numerosos comerciantes que resultaron perjudicados por los daños que ella causó; aproximadamente diez tiendas fueron afectadas por este incendio. El segundo piso del centro comercial recién quedó habilitado el lunes luego de una inspección por parte de la compañía de seguros de los dueños de las tiendas”, indicó.

“Ella hizo lo que hizo sin la menor preocupación por todas las personas que estaban dentro del centro comercial. Decidió que, como tenía rencor contra la dueña de la tienda, simplemente la quemaría. Las víctimas dijeron que le pidieron que no hiciera eso, que esperara a que salieran de la tienda, y ella muy fríamente les dijo ‘no voy a esperar nada’”, dijo Tavares.