Luis Mendoza, director del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) explicó este viernes en una conferencia de prensa cómo se llevó a cabo el incendio intencional en una celda de la Unidad Penitenciaria n°4 (ex Comcar) que tuvo lugar en la noche del jueves y que resultó con dos reclusos fallecidos y otros seis heridos con quemaduras graves.
El jerarca policial señaló que el hecho sucedió en la celda 49 del sector B-0 del módulo 4 y que “no se puede hablar de motín” sino que fue “un incidente puntual”.
“Fue un atentado”, agregó Mendoza.
Comentó que, por detrás del edificio, se acercaron a la ventana de la celda 49 reclusos de otro sector, pidieron a los que la habitaban “que les dieran un teléfono” y ante la negativa, lanzaron el material incendiario que dio origen al foco ígneo.
Mendoza explicó que se trató de una “lamparita” modificada, a la que le sacaron “la parte de atrás” y le pusieron “líquido inflamable”.
“La lanzaron, a posteriori con una botellita rociaron [más combustible] y después con una lanza, que es un palo con una punta, tenían [en el extremo] un pedazo de polifón de colchón con fuego. Ahí prendieron el líquido inflamable y se produjo un incendio”, señaló el director del INR. Sobre la punta y la lanza, dijo que se trató de objetos que no se lograron requisar en un operativo que antecedió a este hecho, en el que sí se obtuvieron otras armas hechas por los reclusos.
“Fueron directamente a esta celda, por lo cual nuestra hipótesis de trabajo es que ellos tenían un problema” con los habitantes de la celda incendiada, señaló Mendoza.
El director del INR contó que los internos de la celda prendida fuego, “con la desesperación” ante las llamas, “rompieron parte de la pared” y se lograron meter, “ayudados por los vecinos” de la celda contigua, la n°50.
“Ese pasaje de una celda a la otra protegiendo su vida fue fundamental para que no afectara a todas las celdas. Tuvieron una válvula de escape al hacer un hueco y pasar con la ayuda de los vecinos”, insistió y señaló que, cuando los operadores carcelarios hablaron con los reclusos, luego de haber visto el humo, estos les dijeron: “Somos ocho, somos seis acá [en la celda aledaña]; dos compañeros quedaron adentro”.
“El oficial y el personal que estaba fueron rápidamente a buscar máscaras para ingresar en la celda, debido al gran humo que había. Ese humo es tóxico para las vías respiratorias. Entraron y encontraron dos internos, uno en el baño y otro en el dormitorio, junto a la cama, los cuales no sabían si tenían signos de vida. Ante la duda, los policías los llevaron de forma inmediata a la Enfermería, a la cual llegaron sin vida. Todo el sector fue retirado para el salón de visitas debido a la gran concentración de humo”, agregó Mendoza.
Sobre cómo consiguieron el líquido inflamable, señaló que la principal hipótesis es que es combustible que obtuvieron de máquinas de cortar pasto con la que los internos cortaron el césped de la unidad. “Con la gran cantidad de lluvia, esta unidad n°4 tiene mucho pasto; creció y esto perjudica la visual de los militares que están en las garitas. Ahí nosotros tenemos que cortar. Se hizo un operativo de corte de pasto y los propios internos cortaron el pasto con todas las [máquinas] pasteras que tiene la unidad”, ahondó Mendoza, que dijo que “sacaron el combustible en una botellita”.
Además, señaló que hay vulnerabilidad por “el tema de los elementos prohibidos que ingresan” a la cárcel. Dijo que en la mañana de este viernes se hizo un operativo en el cual se detectó que una funcionaria de la unidad, una operadora penitenciaria, “estaba ingresando una garrafa grande de agua mineral de seis litros, aparentemente agua y dos botellas grandes de bebida, de gaseosa de manzana”.
“La [Guardia] Republicana hizo este operativo. Teníamos información hace tiempo. La bebida no es lo que dice la etiqueta. La bebida de seis litros de agua mineral era vodka; el vodka es incoloro y a simple vista parece agua. Y la Frutté de manzana tiene color de whisky; en vez de [jugo] de manzana era whisky que estaban ingresando para los internos. Esto es el ingenio que [tienen] visitas y funcionarios que pretenden ingresar elementos no autorizados a la unidad”, comentó.