En la noche del pasado miércoles, un hombre fue asesinado de varios disparos en la explanada de un restaurante en la localidad de Porto Velho, en el estado brasileño de Rondônia. Las imágenes de las cámaras de vigilancia registraron el crimen y se viralizaron.

El video muestra a dos hombres y una mujer sentados en una mesa del establecimiento, rodeados de numerosos comensales que disfrutaban de la velada. A la escena llega luego un hombre renqueante que se aproxima a la mesa y dispara contra la víctima, identificada como Lucas Castro da Silva, de 22 años. Herido, el hombre logra desplazarse unos metros en medio de la desbandada general, pero es ultimado en el suelo por el matador.

La filmación muestra también cómo, segundos antes del ataque, el acompañante de Castro atiende una llamada telefónica y se aparta de la mesa. Esta acción generó suspicacias en redes sociales, foro en el que menudearon las especulaciones sobre una presunta complicidad de este hombre con el asesino.

Tras cometer el crimen, el sujeto subió al mismo auto en el que había llegado y se alejó.

Publicaciones en redes y posterior entrega

Según informara el medio local Rondônia ao vivo, el asesino fue identificado como Glalderson N. S., de 29 años y conocido por el apodo Lorim, y responsable de un asesinato en 2017. En aquella oportunidad, el sujeto mató de varios disparos a un joven durante el desfile de carnaval.

Glalderson también fue acusado de intento de feminicidio al dispararle a una exnovia en abril del año pasado, y también de quitarle el arma de la cintura a un amigo que había sido baleado y yacía muerto frente a una discoteca en febrero del mismo año.

En las horas posteriores al crimen, Glalderson usó su cuenta de Instagram para explicar los motivos de su acción.

En las publicaciones, que posteriormente eliminó, aseguró que el ahora fallecido había intentado matarlo en dos ocasiones. “Me dio 15 tiros, pasé siete meses en silla de ruedas. Después mandó a otro tipo a matarme, pero erró los tiros. Luego continuó amenazándome”, escribió con tortuosa ortografía.

De acuerdo con el citado medio, en la tarde del jueves Glalderson se presentó en la Comisaría de Homicidios de la ciudad acompañado por un abogado.

LAS IMÁGENES PUEDEN HERIR LA SENSIBILIDAD