Mujica aplaudió propuesta del papa y preguntó por el "espíritu cristiano"

El expresidente José Mujica tuvo palabras de elogio para el papa Francisco y su propuesta de crear un salario universal para los trabajadores más humildes, que en tiempos de coronavirus son quienes más sufren las consecuencias de la crisis económica.

En su audición periódica emitida por M24, llamada Hablando al sur, Mujica preguntó "dónde está el espíritu cristiano" de aquellos que van a misa pero no quieren colaborar con los más necesitados.

"Hoy la religión que se pueda profesar en nuestro fuero subjetivo poca incidencia tiene en la conducta real, en la conducta cotidiana de la gente", dijo Mujica.

Sin embargo, dijo que "en estos días llenos de incertidumbre mundial por el coronavirus", que "ha caído como una plaga a la humanidad", el papa Francisco "está hablando de un salario universal para los pobres".

"Nos recuerda las dificultades que tienen los pobres con viviendas precarias para cualquier confinamiento. Todo ese mundo de gente que vive al día, que gana -en el mejor de los casos- para construir la comida de mañana, los que no tienen ninguna garantía legal que los proteja", expresó Mujica.

El expresidente hace referencia a un mensaje que emitió el papa días atrás en el que pidió que los países apliquen un salario universal para los trabajadores más humildes. Citó a "los vendedores ambulantes, los recicladores, los feriantes, los pequeños agricultores, los constructores, los costureros, los que realizan distintas tareas de cuidado", y que "no tienen un salario estable para resistir este momento".

El papa Francisco considera que es "tiempo de pensar en un salario universal" que dignifique las "nobles e insustituibles tareas que realizan" y haga realidad "esa consigna tan humana y tan cristiana: ningún trabajador sin derechos".

En este sentido, Mujica interpreta que Francisco "le plantea al mundo cristiano definitivamente luchar para hacer realidad esa consigna tan humana y tan cristiana de que no quede ningún trabajador sin derechos, sobre todo en estas circunstancias".

"Francisco será papa pero en el fondo es de nuestro barrio, conoce finamente la realidad de las ciudades latinoamericanas y del Río de la Plata, los tejidos de la pobreza", señaló el expresidente.

"Es por esto que en su momento hemos pedido una vaca de recursos mucho más grande y más larga en el tiempo porque después del coronavirus vendrá el tiempo del miedo, de la desconfianza y de la prevención. No hay que soñar que todo va a ser igual a antes, nada va a ser igual a antes, por lo menos por un tiempo prudencial, hasta que la ciencia nos pueda dar una respuesta contundente", expresó.

Mujica consideró que "no vamos a pasar de una semiparalización a una movilización total raudamente, alegremente", por lo que los trabajadores más vulnerables seguirán en esa condición durante un tiempo.

A todo esto, Mujica dio a entender que, en cierto modo, no es errada la idea de no gravar más el capital para ayudar a los más perjudicados, porque para salir de la crisis se necesitará de inversión diversa.

"Nos hemos encontrado con una confusión notable desde el punto de vista de la economía. Tanto por la izquierda como por la derecha. Se tiende a confundir capital con ingreso, y parece que riqueza y capital es lo mismo que ingreso. En ningún momento nosotros hemos hablado de capital, hemos hablado de ingreso, de lo que se gana. Hay una masa de asalariados importantes en este país, la alta jerarquía del sistema bancario, de banca privada, el mundo de las cabezas empresariales de altos empleados. No hablamos de afectar el capital, hemos hablado claramente del ingreso", señaló en referencia a la "vaca" para ayudar a los más pobres.

"Creo que todos los ingresos altos públicos o privados tienen que poner algo durante un tiempo largo y eso no va a afectar jamás la inversión de capital, que es otra historia", dijo Mujica.

El expresidente concluyó: "Me hago esta pregunta: ¿dónde está el espíritu cristiano? ¿Qué sentido tiene ir a misa y no tener coraje de sacrificar algo de lo que se gana para socorrer a los débiles en un momento de penuria que va a durar en el tiempo? ¿Dónde está la definición cristiana? No se ofendan cuando digo que la religión de nuestro tiempo es el mercado".