El principal índice de la Bolsa de Tokio, el Nikkei, rebotó un 10,23 % este martes, su mayor ganancia porcentual desde 2008 y la cuarta de la historia, impulsada por una búsqueda de gangas tras el desplome del 12,4 % en la víspera y por la recuperación del dólar frente yen.
El Nikkei, que agrupa a los 225 títulos más representativos del mercado, cerró con un ascenso del 10,23 % ó 3.217,04 puntos, hasta los 34.675,46 enteros. El Topix, que incluye a las firmas de la sección principal, las de mayor capitalización, sumó un similar 9,30 % ó 207,06 puntos, hasta las 2.434,21 unidades.
De esta forma, el Nikkei alcanzó su mejor resultado en porcentaje desde el 30 de octubre de 2008, en plena crisis financiera global, cuando el selectivo avanzó un 9,96 %, y también su mayor subida en puntos de la historia, al sobrepasar los 2.676,55, también de ese día.
El índice logró así recortar pérdidas tras el batacazo histórico de la víspera, que fue seguido por caídas generalizadas en la mayor parte de las bolsas internacionales espoleadas también por el temor a una posible recesión en Estados Unidos.
El parqué tokiota abrió fuertemente al alza tras su desplome de la víspera, motivado por la fortaleza del yen tras la última subida de tasas del Banco de Japón (BoJ) y los temores a una recesión en Estados Unidos, que hizo cundir el pánico financiero.
Los inversores de Tokio reaccionaron hoy de forma positiva a una leve depreciación del yen frente al dólar y al euro, una tendencia que beneficia a los grandes exportadores nipones al repatriar sus beneficios en el exterior.
El yen se movía hoy durante las negociaciones en Tokio entre los 143,61 y 146,36 yenes por dólar, tras llegar a tocar las 141 unidades durante el lunes, un nivel no visto en más de medio año. Frente al euro, la divisa japonesa se movía este martes entre 157,41 y 160,22 unidades, tras llegar a subir hasta las 154.
Las medidas de endurecimiento monetario anunciadas la semana pasada por el BoJ y el temor a una recesión en EE.UU., que disparó las especulaciones de una aceleración del previsto recorte de tasas en el país norteamericano, habrían sido las responsables de esta reciente apreciación, al reducir la brecha de sus tipos de interés.