La intendenta de Montevideo, Carolina Cosse, dijo estar “indignadísima” con el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) porque la cartera negó el aval para que el gobierno departamental accediera a un préstamo no reembolsable del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), destinado a financiar medidas para enfrentar los problemas con el servicio de agua potable en la capital del país.
En una carta de respuesta a la autorización solicitada por Cosse, la ministra Azucena Arbeleche expresó que el Poder Ejecutivo había emitido la emergencia hídrica en el área metropolitana para brindar mayor seguridad jurídica y dar agilidad a los procedimientos administrativos para afrontar la actual situación.
El MEF además señaló que, en caso de considerarse necesario, se podrá recurrir al apoyo de organismos multilaterales de crédito “ante los cuales es el ministerio el que ejerce la representación del país”.
Este miércoles, los conductores de En perspectiva Emiliano Cotelo y Romina Andrioli conversaron con el director de Desarrollo Ambiental de la Intendencia de Montevideo (IM), Guillermo Moncecchi, con el fin de abordar la posición de la comuna departamental tras el desencuentro entre las partes.
El exministro de Industria informó que, en general, en estos casos lo que se hace es trabajar los proyectos con los equipos del BID y posteriormente pedir lo que es prácticamente un trámite, que es la “no objeción del MEF”.
El jerarca señaló que una de las acciones que llevó adelante la IM fue pedir a diferentes organismos internacionales “ayuda ante la situación de crisis hídrica”.
“Una de las respuestas que tuvimos fue del propio presidente del BID, que le encomendó a sus equipos técnicos en Uruguay trabajar y apoyar a la IM con un foco en la población más vulnerable. Dentro de nuestras competencias, identificamos que se podía dar apoyo con una donación [crédito no reembolsable] a las policlínicas con el fin de extender el acceso del agua”, dijo.
En esta línea, Moncecchi dijo que los montos manejados eran de decenas de miles de dólares, en el entorno de los US$ 100 mil.
“Hoy tenemos una situación de crisis que se está ampliando. Y si queremos llegar a más lugares, toda la ayuda nos parece importante. No entiendo por qué nos tenemos que negar a una donación. ¿Tengo que decir que no porque debería tener la plata? No”, afirmó.
Y añadió: “El agua de la canilla no se puede tomar. Inventaron este concepto de bebible versus potable, cuando son sinónimos. El agua de Montevideo hoy no es potable. Y nos están diciendo que no recibamos una donación del BID. No hay otro mensaje acá”.