Decenas de militares de Venezuela han lanzado este lunes bombas lacrimógenas contra los ciudadanos que salieron a protestar en Caracas en rechazo al resultado de las presidenciales brindado por el Consejo Nacional Electoral (CNE), que le otorga al presidente Nicolás Maduro el 51,2% de los votos, un dato cuestionado por la oposición y por buena parte de la comunidad internacional.

Luego de caminar cerca de 10 kilómetros por el este de la capital venezolana, los miles de manifestantes llegaron a un punto cercano a la autopista principal, donde efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB, policía militarizada) y de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) impidieron la continuación de la caminata.

EFE constató que, en el lugar, los uniformados dispararon gases lacrimógenos y perdigones contra los manifestantes, y detuvieron a una veintena de ellos mientras persisten las protestas y la movilización de personas en varios puntos de Caracas.

Los manifestantes, que mantuvieron una acción pacífica hasta que fueron agredidos por los cuerpos de seguridad, se han visto afectados por los gases liberados, mientras que medios locales han mostrado a algunas personas heridas por los perdigones.

La acción de los uniformados no ha disuadido a los manifestantes, cuyo número seguía creciendo pasadas las 17:00 hora local.

Varios de los manifestantes descolgaron carteles de la campaña de Maduro y los arrastraron por el suelo, atados a las motocicletas, donde había acompañantes tocando con fuerza cacerolas en señal de protesta.

A través de las redes sociales, han circulado numerosos reportes de protestas similares en varias regiones del país petrolero.

La líder antichavista María Corina Machado dijo este lunes que el “nuevo presidente electo” de Venezuela es Edmundo González Urrutia, el abanderado de la principal coalición opositora, pese a los resultados anunciados por el ente comicial, que hoy insistió en que Maduro obtuvo la mayoría de votos válidos en las presidenciales.

EFE