El Sindicato Médico del Uruguay (SMU) elevó al gobierno un documento en el que expresa por qué debería decretarse la cuarentena general para evitar que continúen los contagios de coronavirus en nuestro país. De esta forma entienden que se evitaría que colapse el sistema de salud, lo que ayudaría a trabajar mejor con los enfermos.
El pasado martes, el SMU exhortó al gobierno a decretar la cuarentena general, lo que restringe la circulación callejera de la ciudadanía y alienta la distancia social.
Sin embargo, desde el Ministerio de Salud Pública pidieron al SMU un informe en el que se detallen los argumentos por los que entienden que debería decretarse la cuarentena.
Dicho informe, al que accedió Montevideo Portal, se divulgó este viernes. En el documento se expresa que el objetivo primordial es controlar la epidemia del Covid-19 y, más específicamente, "maximizar la desaceleración de la curva de contagio (números de casos/tiempo) y disminuir al mínimo las posibilidades de saturación y colapso del sistema de salud dando lugar a una gestión adecuada".
El plan se divide en tres etapas. La primera sería la declaración de la cuarentena general, la segunda (que entienden que debería empezar hoy y terminar el 12 de abril, o sea, el último domingo de la Semana de Turismo) sería la del desarrollo de la cuarentena y la tercera sería la del desarme progresivo de dicha cuarentena.
Este "desarme progresivo, programado y estructurado de la cuarentena" a partir del 12 de abril debería ser aplicado, entienden, de forma similar a como se hizo en Corea del Sur.
Para qué
Los médicos señalan que la cuarentena limita al máximo posible "la circulación de personas con el objetivo del control sanitario epidemiológico". En ese sentido, entienden que otros países que no tomaron esta medida a tiempo sufrieron las consecuencias.
"Se estima que la instalación de la cuarentena en forma paulatina no es adecuada como ha sucedido en otros países, por el contrario, se propone una medida radical en el inicio, acompañando la suspensión de clases y eventos públicos, y manteniendo los servicios esenciales. Esta medida ha demostrado ser el mecanismo más efectivo para disminuir de forma drástica la transmisión del virus en la comunidad para evitar un pico máximo de infección y de pacientes potencialmente graves", expresaron los médicos.
"Se considera necesario que el gobierno, a través del equipo económico (MEF, BCU y OPP), establezca las condiciones y los sectores de la economía considerados esenciales. Estos sectores deberían permanecer en funcionamiento parcial o total mientras dure la cuarentena general, poniendo especial énfasis en la producción y provisión de alimentos, medicinas, recolección de residuos, logística mínima imprescindible y transporte, entre otros", añaden en el comunicado.
Uno de los objetivos de declarar la cuarentena sería poder reorganizar el sistema de salud, principalmente con el foco en el desarrollo, producción y distribución de insumos y kits para el test de diagnóstico en pos de "la mejora de las estrategias de prevención y aislamiento adecuado de casos y contactos".
Otra reestructura sería en la modalidad asistencial, que desea dejarse a un lado para "orientar los esfuerzos a potenciar la teleasistencia", sea por teléfono o videollamada. Para ello, el SMU entiende que debería desarrollarse en cada prestador de salud un centro de estas características.
"Los prestadores públicos y privados deberán contar con un centro de atención remota en donde los profesionales puedan realizar una adecuada selección de pacientes y asistencia primaria de forma tal de reducir al máximo la llegada al centro asistencial de pacientes que no requieran del mismo", señala el informe.
También entienden necesario que se haga un "rediseño de áreas asistenciales para internación en sectores o nosocomios según cohortes para Covid-19".
"Una vez logrado el mínimo desarrollo de centros de teleasistencia, la reestructura laboral y la disponibilidad y aplicación de los materiales de testeo adecuado, se daría paso a la siguiente fase", dice el comunicado.
La tercera fase, la del desarme progresivo de la cuarentena, también sería fundamental para evitar el colapso del sistema de salud y la propagación generalizada del virus.
"De acuerdo con las posibilidades amplias de realizar test, tanto para casos sospechosos como para personal de salud, se deberían diseñar estrategias de testeo por sectores de población, pacientes, contactos y grupos de personas según modelos ya implementados en otros países (ejemplo: Corea del Sur)", dice el informe.
"Se trata de mantener aislada a la población vulnerable en cuarentena, con desarme progresivo acompañado de un monitoreo y testeo permanente de la población para evitar el avance del virus", expresaron.