El sistema de interceptación de comunicaciones del Ministerio del Interior, El Guardián, ha estado sobre la mesa luego de que el exjefe de la custodia presidencial, Alejandro Astesiano, asegurara que tenía acceso a la red.

La fiscal del caso, Gabriela Fossati, aclaró que no tiene certeza de que el exfuncionario haya utilizado El Guardián. Asimismo, jerarcas del Ministerio del Interior aseguraron en varias oportunidades que es “imposible” que Astesiano pudiera tener acceso a la herramienta.

Lo cierto es que hay 462 policías de 29 reparticiones que tienen acceso a El Guardián, según dijo el ministro Luis Alberto Heber en la comparecencia ante la Comisión de Seguridad Pública y Convivencia del Senado el pasado lunes. Desde la oposición cuestionaron qué tan “imposible” es que Astesiano haya tenido acceso al sistema.

En la cartera de seguridad explicaron que los más de 400 policías acceden a El Guardián cuando se les asigna una investigación en la que corresponde realizar escuchas. Antes de esto, la Fiscalía debe pedir una orden judicial y un juez debe aprobarla para que así las empresas de telecomunicaciones comiencen a realizar las escuchas.

El sistema de espionaje es “pasivo” porque solo recibe información, no se encarga de obtenerla. Es decir: las telefónicas son las que pasan la información, y el sistema se encarga de reunirla y cruzarla.

Los funcionarios solo pueden recibir datos correspondientes a la causa que investigan, con lo cual no tienen la posibilidad de entrar al sistema y ver todo lo que se está interviniendo.

Para ingresar a El Guardián, se requiere un usuario y una clave que se va cambiando cada determinado tiempo. Cada vez que esto sucede, el director de la unidad debe aprobar estas credenciales, aclararon desde Interior.

Cada ingreso y movimiento que se realiza queda registrado, ya que luego la Suprema Corte de Justicia realiza auditorías. “Te diría que las 462 personas que acceden son pocas y ni siquiera es un tema de confianza, porque es inviable acceder sin orden de un juez”, agregó la fuente.