Guido Manini Rios, senador de Cabildo Abierto, propuso que se equipare el régimen tributario del sector forestal a los demás subsectores de la industria agropecuaria, eliminando las exoneraciones de IRAE (Impuesto a las Rentas de las Actividades Económicas) que puedan estar vigentes, así como dictar un decreto adecuando las tasas de IMEBA (Impuesto a la Enajenación de Bienes Agropecuarios) a la venta de productos forestales.
"Creemos que es un rubro que genera riqueza en el país y que es muy importante mantenerlo dinámico y activo, lo que nosotros decimos es que todos los rubçros, todos los sectores del sector agropecuario tienen que tener el mismo tratamiento", dijo Manini Rios, añadiendo que hoy en día hay campos que son "sumamente caros para acceder a ellos" y desempeñar actividades diferentes a la forestal, pero que esta industria puede pagarlos "debido a ciertas exoneraciones tributarias que tiene".
El senador cabildante afirmó que el gasto tributario, es decir las renuncias fiscales que tiene el estado uruguayo, ronda el 6,3% del Producto Bruto Interno (PBI) lo que es el "doble del promedio de los demás países de la región". Manini Rios dijo que con esta medida se podría bajar a un 2% del PBI, lo que significaría "una suma muy importante en momentos en los que se necesita".
A su vez, planteo la aplicación de un "IVA personalizado", que funcione como un crédito fiscal a la persona de acuerdo con sus ingresos. "Por ejemplo, quien tiene los recursos necesarios compra la leche exonerada de IVA, tal vez podría pagar el IVA completo y exonerar a quien realmente tiene dificultades económicas" afirmó el legislador quien sostuvo que las nuevas tecnologías permiten la implementación de este sistema.
Manini Rios dijo que se presentan estas propuestas ahora, porque "es el momento oportuno", dado que la coalición esta discutiendo internamente la Rendición de Cuentas, por lo que es un tiempo en el que se trata de asignar o reasignar recursos y hacer correcciones a la Ley de Presupuesto.
El senador plantea además la actualización de la Ley de Promoción de Inversiones de 1998, para adaptarla a los "criterios y prácticas de hoy, equilibrando los impulsos que el Estado brinda mediante exoneraciones a distintos sectores del país". Desde Cabildo Abierto se propone que estas políticas deberían estar ancladas en actividades capaces de generar "derrames" como la investigación y la innovación y estar orientadas a corregir fallas del mercado, "en vez de estar destinadas a compensar el elevado costo país para que se puedan llevar adelante las inversiones".