Unos 50 músicos y técnicos de la Orquesta Filarmónica de Montevideo firmaron una carta en rechazo al concierto que celebraba los 70 años de la creación del Estado de Israel, en el Teatro Solis.

Dos horas antes del concierto, varias personas se concentraron en la puerta del Teatro con pancartas y fotografías de personas que fueron asesinadas por el Estado israelí, al protestar por el bloqueo a la Franja de Gaza.

La embajadora de Israel en Uruguay dijo al diario El País que “la raíz del conflicto tiene base en el negacionismo, en aquellos que no quieren que existamos”, señaló la embajadora quien agregó que si los árabes hubieran aceptado la resolución de Naciones Unidas que partió a Palestina en dos estados, uno árabe y otro judío “hoy estaríamos festejando la independencia de dos Estados”.

En ese sentido se expresó la periodista Ana Jerozolimski en su cuenta de Facebook: “Por más que este tipo de protestas suelan disfrazarse de legítima crítica a “una postura del gobierno” de turno, está clarísimo que de fondo hay otra cosa. Uno de los carteles colgados en la manifestación, lo decía todo: “Desde el río hasta el mar es Palestina”. Históricamente, claro que sí. Ese era el nombre, dado por los romanos a lo que antes se llamaba la tierra de Judea. O sea, el nombre Palestina no es por los árabes palestinos de hoy, sino que data mucho antes de su llegada a la tierra en cuestión. Pero quien usa hoy esa frase, como la del cartel, no está dando una clase de geografía histórica sino diciendo que el Estado de Israel creado en ese territorio, no es legítimo y que entre el río (el Jordán) y el mar (Mediterráneo), no debe existir Israel sino solamente un Estado palestino”.

Jerozolimski agregó que quienes se manifestaron no están preocupados por la situación de los palestinos, señalando que “no dicen ni una palabra sobre la terrible situación en la que los ha sumido el gobierno de Hamas en la Franja de Gaza, que controla dicha zona desde junio del 2007 y no ha hecho nada desde entonces por el pueblo, optando por destinar sus recursos, muchos millones, al fortalecimiento de su capacidad armamentista”.

“Quizás no lo sepan…les doy el beneficio de la duda. Pues es hora de que se enteren todos aquellos que están preocupados por los palestinos de Gaza: los palestinos de la Franja viven bajo la opresión de Hamas, que destina sumas millonarias a fundiciones de cohetes y construcción de túneles, en lugar de construir escuelas y hospitales y dar a la población todo lo que necesita. Dicho sea de paso, lo que necesita la población, lo recibe diariamente a través del pasaje fronterizo Karni, por el cual Israel introduce todos los días centenares de camiones con mercaderías para los palestinos”, agregó.

“No descarto en absoluto que entre los 50 opuestos al concierto, haya habido también alguno motivado solamente por buena intención, por ideales puros y humanistas, de buscar la paz entre los pueblos, que crea que criticando a un gobierno con el que discrepan, están aportando a una buena causa. Pues a ellos les decimos que la mejor forma de ayudar a los palestinos es dedicar la energía que ponen en estas manifestaciones y protestas anti israelíes, a otras manifestaciones, presionando a todas las partes –o sea también a los palestinos- a volver a negociar. Que dediquen al menos parte de la energía que ponen en esto, a presiones públicas sobre Hamas, que deje de usar a los palestinos de Gaza como rehenes de sus prácticas terroristas”, añadió.