El subsecretario del Ministerio del Interior, Guillermo Maciel, se refirió al episodio protagonizado por el jefe de Policía de Maldonado, Erode Ruíz, en el marco de la detención de un hombre en el Centro de la ciudad fernandina. 

“El tema ahora está en Fiscalía y la última palabra siempre la tiene la fiscal que va a analizar el tema”, dijo el jerarca. Sin embargo, consideró que al parecer “es una típica situación que encuadra en el desacato y del agravio a la autoridad policial”.

“Creo que el comportamiento fue exagerado de parte de este joven al resistirse, de agraviar a la autoridad policial”, agregó en diálogo con Subrayado (Canal 10). En este sentido, recomendó a la ciudadanía “no desacatarse frente a la autoridad policial”. “Si a uno lo detienen y le piden los documentos, exhibir los documentos y si uno no cometió ninguna infracción, ningún acto contrario a la legislación, no va a tener ningún inconveniente”, dijo.

El video inicia con la interacción entre el joven y los dos policías. “Para, para, para, para, se llevan el mundo por delante”, le dice el hombre a una de los policías, cuando esta busca agarrar el celular con el que el joven parece estar grabando la escena. El otro policía lo retiene y le dice “te estoy agarrando bien”, a lo que el muchacho le responde: “No, no me agarres, no me estás agarrando bien. Agarrame bien. Estoy acá en la plaza, está todo el mundo viendo”, grita, mientras mira a la cámara de su celular.

“No voy a entrar”, expresa el joven. En eso, entra a escena Erode Ruiz, que va directo a tomar el teléfono del muchacho, al tiempo que también intenta retenerlo junto a los otros policías.

“Mierda, respetá a la policía atevido. Respetá a la policía, vos tenés que respetar a la policía. A la policía hay que respetarla”, le grita el jerarca al muchacho, mientras parece pegarle cuando lo sujetan sobre el capó de un auto.

“Dale hijo de puta”, agrega Ruiz, antes de forcejear, junto a otros cuatro efectivos, con el joven, que termina en el pavimento. Luego de eso, se ve cómo el titular de la jefatura le pega una bofetada al hombre.