Fotos: Juan Manuel López
Eduardo Lust (61) dice que se metió en política por culpa de la papelera finesa UPM. Y que él es un hipócrita, como todo político. Porque como dijo Montesquieu, el político es hipócrita por naturaleza. Lust es verborrágico, y contesta todo sin ambages. En su despacho tiene un cuadro de Wilson saludando cuando fue detenido al llegar al puerto de Montevideo, dice que él siempre militó en el Partido Nacional, pero hoy no podría integrar ese partido, porque los blancos no defienden "lo nacional" y él sí. Los "patrones" de Lacalle Pou y sus ministros, afirma, son las multinacionales, con UPM a la cabeza.
Lust, abogado constitucionalista, dice que hay cosas con las que no transa y para él no hay disciplina partidaria que valga. Por eso a los tres meses de gobierno interpeló a cuatro ministros -bajo la atenta mirada de Lacalle Pou- y percibió la "deslealtad" del Parrido Nacional. Se horrorizó cuando escuchó decir al ministro de Transporte y Obras Públicas en TV que había puesto todo el ministerio al servicio de UPM. "En un país serio, no dura ni media hora después de haber dicho eso", señaló. Por eso, cree que Heber debería renunciar. Como también el fiscal de Corte, Jorge Díaz, debería dar un paso al costado, pero no tuvo esa "sensibilidad", a su juicio.
El diputado cabildante, que está en vías de formar una nueva agrupación dentro de la colectividad, sostiene que el presidente tiene suficientes elementos para romper unilateralmente el contrato con UPM, dados los incumplimientos de la pastera. Pero no lo hará porque a Lacalle Pou -que estaba en contra del contrato firmado por el gobierno anterior- "lo comió el sistema".
De yapa, comenta que hay un temita a estudiar con el número 13.
-¿Siempre quiso ser abogado?
-En el liceo en Paysandú era así: al que le gustaba la poesía, la filosofía y la historia, tenía que estudiar letras, otros iban por el lado de arquitectura, derecho o medicina, las clásicas. No era como ahora que hay 100 carreras entre todas las universidades y la UTEC. Yo no tenía, inicialmente, una vocación fuerte. Dije: "Voy a estudiar esto, a ver qué pasa". Hay muchas ramas de la abogacía, que a mí no me gustan, además.
-Y dentro de la abogacía, ¿qué rama lo entusiasmaba más?
-Siempre el derecho público. El derecho se divide entre público y privado. Ulpiano, emperador de Roma en el año 500, dio la mejor definición: "Hay cosas que son de los romanos y hay cosas que son de Roma", ahí nace el derecho privado, por las cosas de los romanos, y el derecho público, por las cosas de Roma. A mí siempre me gustó, no tanto el ejercicio de la abogacía, sino la formación que te da. Y te permite acceder a determinadas áreas de conocimiento que de otra forma no accederías, por lo menos en mi época. Hoy está todo en el teléfono. El derecho público tiene muchos sub-derechos. El derecho constitucional te da una visión total del sistema. Francis Bacon en 1700 dijo: "Toda la verdad está en la Biblia". Y yo digo: "Toda la verdad está en la Constitución".
-¿Cuándo se decidió a dar el salto a la política?
-Toda la vida milité en política, en el Partido Nacional. Pero mi pensamiento es incompatible con el programa de ese partido. Me gusta el Partido Nacional por su historia, es el héroe de la tragedia griega, el héroe siempre derrotado, pero jamás vencido. Yo sostengo que el Partido Nacional dejó de defender los intereses nacionales, y lo comió el sistema. Los comió a todos, también al Frente y a los colorados. Entonces, ¿qué veta encuentro para enfrentar al sistema? O no hacía nada, o aceptaba la invitación que me había hecho Cabildo Abierto.
-¿Y por qué Cabildo Abierto?
-Cabildo me invitó varias veces y yo siempre le dije que no. Pero 15 días antes de las elecciones, en virtud de circunstancias laborales y personales, les dije que sí, y ahí entré en la política. Con lo que yo sostengo, en el Partido Nacional no tengo espacio. Cuando yo entré en Cabildo Abierto, les dije lo que yo pensaba en determinados temas, y no me hicieron ningún problema. Cabildo Abierto es un partido nuevo y los electores son siempre los mismos, o sea que la gente que lo votó dejó de votar a otros partidos. Si yo sostengo que el programa de los blancos se olvidó de lo nacional, bueno, si pienso eso, no puedo estar ahí. En Cabildo Abierto yo defiendo lo nacional.
-Con apenas tres meses de gobierno interpeló a varios ministros (Azucena Arbeleche, Luis Alberto Heber, Omar Paganini e Irene Moreira de su propio partido) por la segunda planta de UPM. Fue raro y no cayó bien en el seno del Partido Nacional esa interpelación en junio. ¿Qué cree que consiguió con eso?
-Primero, aprendí cómo hay deslealtad en la política. Fijate que ahora el FA plantea interpelar a Larrañaga, en algún momento se va a fijar, el reglamento dice que tiene 15 días hábiles. Pues, yo planteo llamar a sala a los ministros para que expliquen el contrato con UPM. En esto se dio algo histórico: todos los partidos estaban unidos, porque el FA había firmado el contrato, blancos y colorados lo estaban ejecutando, entonces nadie iba a poder protestar.
¿Por qué digo deslealtad? Porque el Parlamento votó a las 16 horas el llamado a sala y lo fijó para las 18 horas. ¿Cuál fue la intención? Que Lust no tuviera qué decir, que no pudiera preparar la interpelación. Ya estaban acá todos los ministros, y hasta el presidente vino. Pensaron: "Lust no tiene experiencia, sabrá mucho de derecho constitucional, pero de esto no sabe nada y ahora de repente tiene cuatro ministros enfrente". Todo eso lo pensó el Partido Nacional. Y me salvó la plata el Frente Amplio (FA). El FA dijo: "Nosotros vamos a votar el llamado a sala. Nos hacemos responsables de la inversión, pero no le podemos pedir a un diputado que arranque una interpelación a las 18, cuando se votó a las 16".
Ahora, en la interpelación (a la que vino el presidente), quedó demostrado que el contrato es indefendible porque los ministros blancos lo dijeron. Le pregunté al ministro de Industria por qué había que comprarle la energía a UPM y me dijo: "Porque lo dice el contrato". La ministra de Economía dijo que el negocio era "muy malo", el ministro Heber dijo que el negocio era "indecoroso". Y Heber se enojó en la madrugada, y habló muy mal del FA y muy mal del contrato. Esa noche vi lo que es la política al servicio de las multinacionales, porque van los ministros, dicen lo que dicen (y yo comparto), y cuando termina el llamado a sala, la típica: "El Parlamento se da por satisfecho con las explicaciones". Yo declaré: "Me doy por satisfecho con la presencia de los ministros, pero muy insatisfecho con lo que escuché". Al dejar descubierto el mal negocio, pensé: "Ahora el Parlamento se enteró de todo, ya lo sabían, pero ahora se dio a publicidad. Bueno, Lacalle tomará medidas... Conseguirá algo", pero no. No hizo nada. Por eso digo que todos trabajan para UPM. Bah, lo dicen ellos.
"En la interpelación descubrí la deslealtad del Partido Nacional. El Parlamento votó a las 16 horas el llamado a sala y lo fijó para las 18 horas. ¿Cuál fue la intención? Que Lust no tuviera qué decir, que no pudiera preparar nada. Eso lo pensó el PN. Y me salvó la plata el FA"
-Anteriormente había ido hasta Torre Ejecutiva con Gustavo Salle y Patricia Wolf, a protestar por el contrato de UPM, la relocalización de la planta y el trazado de las vías del tren. ¿No le dio bolilla el presidente?
-No. El presidente hizo algo muy republicano, que se lo reconozco. Se le pidió una audiencia y al otro día nos dio la audiencia, y nos recibió solo. Mire, el contrato de UPM lo escribió un profeta, porque en 2016 predijo lo que iba a pasar en 2020. En la cláusula 7 puso: "Si Uruguay estuviere en una crisis sanitaria producto de una epidemia, ambas partes pueden parar la inversión". Solo no dijo coronavirus, pero previó esto. "Y tendrán que continuar de acuerdo a lo que dice el artículo 13", agrega. El artículo 13 dice que cualquiera de las partes puede parar la inversión, y cuando ellos estimen convenientes, las dos partes tienen tres posibilidades: o renegociar el contrato en virtud de que pasó algo que no podía preverse; dejar sin efecto el contrato o continuar con el contrato.
Ahora... yo encontré una curiosidad con el número 13, habría que hablar con algún numerólogo. A los 13 días de asumir la presidencia el doctor Lacalle cae el virus. El artículo 7 del contrato con UPM dice que, si hubiera una epidemia, hay que ir a lo que dice el artículo 13, que dice cómo parar el contrato. Y ahí dice que cualquiera de las partes tienen 20 días para comunicarle a la otra que hacen uso de la opción que da lugar el artículo 7. Y esos 20 días se cumplían el 13 de abril. Yo incluso le dije a Lacalle: "Usted tiene tiempo hasta el 13 de abril para parar todo esto". El 13 de abril es una fecha importante, recuerda el 13 de abril de 1813 que fue la primera manifestación pública de la independencia uruguaya. El 13 de julio preparé la denuncia contra Toma, Roballo y García, y el fiscal fija la audiencia para el 13 de agosto. El Partido Colorado, que es el ideólogo de las papeleras, tiene 13 diputados, y el FA, que es el que trajo a los ambienticidas (sic), tiene 13 senadores. Y hay más: si vos dividís la inversión de UPM por los puestos de trabajo, da que por cada puesto de trabajo que brinda UPM Uruguay da en subsidio 13 millones de dólares.
-Bien... juéguele al 13 al 5 de Oro, aunque difícil no haya ganado premio el "Loco" Abreu antes. A todo esto, ¿le dio bolilla Lacalle Pou en esa reunión?
-Lacalle nos dijo que con respecto a UPM él tenía una estrategia, que no nos la iba a revelar a nosotros. Que la iba a anunciar unos días después. A los dos días de reunirse con nosotros en Torre Ejecutiva, se reunieron los ejecutivos de UPM de noche. Porque ellos actúan en la noche... es una señal del lenguaje corporal actuar en la noche. Los principales ministros se reunieron con los ejecutivos de UPM, en la noche, por la puerta de atrás de Torre Ejecutiva y sin prensa. Y a los dos días el presidente de la República levantó la cuarentena para que vuelva la construcción. Lo primero que se levantó fue la cuarentena para las escuelas rurales y para la construcción, para que trabajen en la planta de UPM.
-¿Por qué cree que, siendo que como legislador se oponía a una segunda planta, Lacalle Pou siguió adelante con la segunda planta?
-Que el presidente esté a favor es legítimo. Yo hago una cuenta donde veo que el 88% del electorado votó partidos que están a favor de UPM. Lacalle estaba contra UPM hasta el año pasado, pero es que a Lacalle Pou lo comió el sistema. Yo ahí tengo una postura filosófica: nuestros gobernantes pertenecen a un tipo humano que son manejados por otro tipo humano que maneja la economía, la información y la educación. Ese tipo humano, que yo calculo son entre 10 y 15 millones de personas en todo el planeta, maneja a los gobiernos. Tú sos gobierno si ellos quieren. Hablo de que manejan los medios de información, de que transformaron la educación en una fábrica de recursos. A nadie le importa tu identidad, vos sos un recurso. Lacalle está en ese grupo. Están todos en ese grupo. Lacalle hizo un llamado a sala contra UPM. Pero se dio vuelta porque pertenece a un tipo humano que es manejado por las multinacionales, como manejaron a Vázquez.
-Por eso usted dijo: "A este gobierno, como al anterior, no le importa la gente". Es muy duro decir eso del propio gobierno que usted integra.
-Lo sostengo. Me refería a la gente que vive al lado de las vías del tren, son 30.000 personas. A Lacalle lo comió el sistema. Yo le dije en Torre Ejecutiva, ahí frente al monumento a Artigas en Plaza Independencia: "Si usted toma la decisión de parar la obra, capaz que hay que bajar a Artigas y subirlo a usted". Pero bueno, él se dejó llevar por eso que es una mentira... Él cree que eso es lo mejor, nosotros creemos que es lo peor. Y dentro de nuestra pequeñez estamos dando la lucha.
-¿Qué es lo más peligroso del contrato? ¿Nos entregamos de pies y manos y sacrificamos la soberanía, como sostiene Gustavo Salle?
-Sí, claro. Mucho de lo que dice Salle yo lo comparto. Nosotros escribimos un libro que está inspirado en el presidente Lacalle. Cuando el legislador Lacalle Pou llamó a los ministros, dijo: "Esta es la mayor entrega en la historia del Uruguay". Lo dijo el hoy presidente. Maquiavelo, que era un capo, en 1505 cuando escribió El Príncipe, le decía al príncipe de Florencia: "Toma las medidas antipopulares al principio, porque al final la gente se olvida". Entonces, la gente se olvida de lo que antes dijo Lacalle. Nosotros sacamos un libro que se llama La Entrega, en homenaje al presidente Lacalle. Ahora, es una entrega absoluta, no tiene precedentes. Se le entregó el suelo y el agua, además de destruirle la vida a miles de personas.
"Lacalle estaba contra UPM hasta el año pasado, pero es que a Lacalle lo comió el sistema. Ahí tengo una postura filosófica: nuestros gobernantes pertenecen a un tipo humano que son manejados por otro tipo humano que maneja la economía, la información y la educación"
-¿Cómo es su situación interna en Cabildo Abierto?
-Es buena, como siempre. Tuve un problema puntual con mi agrupación. Mi agrupación se enfrentó a Cabildo en un tema en el que yo quedé por fuera.
-El militar retirado Eduardo Radaelli, ¿le pidió al sector Movimiento Cruzada Oriental (lista 84) que se fuera de Cabildo Abierto o le pidió a usted que se fuera del movimiento?
-Ahí hubo un problema de titulares de prensa. Hay una poesía de Ruben Blades que dice: "Los medios de difusión confunden la información". El titular de un medio decía que Radaelli le pidió a Eduardo Lust que abandone la agrupación. Lo que hizo Radaelli fue pedir que se expulsara a la lista 84 de Cabildo Abierto. El tema es así: ponele que la lista tiene unas 20.000 personas que la votaron, pero hay una comisión directiva de cinco o seis miembros. Ellos tienen un problema interno con Cabildo, y Cabildo le inició una especie de procedimiento disciplinario, ellos hicieron su descargo, y el comité disciplinario entendió que era incompatible lo que ellos hacían con los principios del partido y los va a expulsar, a esos dirigentes.
-Ahí entonces usted forma una nueva agrupación, dentro de Cabildo Abierto: Movimiento Ambiental Constitucionalista. ¿Quiénes lo van a integrar?
-Capaz que tengo que ajustar el nombre. No puedo integrar a los dirigentes que fueron expulsados. Pueden sumarse otros.
-"Hay personas dentro de Cabildo Abierto a las que no les caigo bien", dijo usted en Desayunos Informales. ¿Quiénes son y por qué no lo quieren?
-No sé quiénes son. Hay gente cercana a la cúpula de Cabildo Abierto que me dijo: "Hay gente en Cabildo Abierto a la que no le caés bien, por actitudes tuyas o tu discurso". No sé quiénes son, ni tengo interés en saberlo. Esa gente a mí no me ha hecho nada, simplemente opina mal de mí.
-¿Su postura respecto a la Ley de Caducidad tiene algo que ver en que no les caiga bien a algunos dirigentes de Cabildo Abierto?
-Puede ser un motivo, sí, porque la Ley de Caducidad es una ley que nadie leyó. Es una ley inconstitucional, porque le transmite las competencias para juzgar o no al Poder Ejecutivo. O sea, recibida la denuncia, el juez le pregunta al Poder Ejecutivo si lo juzga o no. Y el Ejecutivo tiene un plazo de 30 días para contestar que sí o que no. Si guarda silencio se entiende que puede juzgarlos. Eso es inconstitucional, porque le traslada una competencia indelegable que es la función jurisdiccional al Poder Ejecutivo. Es un tema formal.
-¿Qué piensa de la Ley de Caducidad?
-La Ley de Caducidad es inconstitucional, pero en el sistema uruguayo la Constitución no defiende a la Constitución, defiende a las leyes. Tanto es así que una ley inconstitucional, aún declarada inconstitucional, continúa vigente. Esa es la prueba de que la Constitución defendió a la ley. ¿Cuál es la costumbre uruguaya? Y es una buena costumbre: cuando la Corte declara inconstitucional una ley, el Parlamento la deroga, para sanear el sistema. Mi opinión es que la ley es inconstitucional, pero hay que cumplirla, porque si no, el gobierno es una anarquía. Después, entramos en la prescripción, que impide el juzgamiento. El Tratado de Roma dice que a los violadores de derechos humanos hay que juzgarlos, aunque hayan pasado 100 años (cosa que yo apoyo). Pero el Tratado de Roma es del año 90, y debe aplicarse desde su existencia, no se puede aplicar con retroactividad. Entonces, aunque no nos guste, (los militares) están protegidos por eso. Y como yo creo en el formalismo del derecho, aunque no nos guste, hay que aplicarlo.
-El senador Manini Ríos preguntó en el Parlamento: "¿Hasta cuándo se procesará militares octogenarios por hechos ocurridos hace 40 años?". ¿Usted piensa igual?
-El general Manini dio una opinión emocional, porque no tiene formación jurídica. Yo eso no lo comparto, no pienso igual. Hay formalidades del derecho, que dirían que esos militares podrían estar sujetos a juicio. Pero quiero ser preciso en esto: como el general Manini no tiene formación jurídica, hizo esas declaraciones desde lo emocional, respecto a sus compañeros de armas. Ahora, jurídicamente, no se los puede condenar. Yo coincido en el fin del tema: en que no se los puede condenar. No coincido en los motivos. El motivo es que el derecho impide que se los juzgue, aunque no nos guste. Y el senador Manini no quiere que los juzguen, por un tema emocional y de pertenencia al cuerpo.
"La Ley de Caducidad es una ley que nadie leyó. Es una ley inconstitucional, porque le transmite las competencias para juzgar o no al Poder Ejecutivo. O sea, recibida la denuncia, el juez le pregunta al Poder Ejecutivo si lo juzga o no"
-Hubo un cruce de acusaciones entre los principales dirigentes de la agrupación que usted integraba y las autoridades de Cabildo Abierto. Desde el Movimiento Cruzada Oriental se le reclamaba la poca participación que tenían las listas en las decisiones políticas, donde -decían- mandaba una cúpula de militares. Y también señalaba que faltaba transparencia en la toma de decisiones. ¿Usted comparte esto?
-Parcialmente. Yo la estructura de Cabildo no la conocí demasiado. Y a mí, desde el punto de vista político, Cabildo nunca me dijo que dejara de decir algo. Al contrario: todo lo que le pedí a Cabildo Abierto, me contestaron que sí. Le pedí llamar a ministros cuando recién había entrado el gobierno y me dijeron que sí, denuncié al fiscal Díaz y Cabildo me acompañó, seguí mi campaña contra el tren y contra UPM y Cabildo me acompaña, entonces no puedo decir nada. Ahora, que hay gente que dice eso -no solo el Movimiento Cruzada Oriental, sino otros grupos del interior que han dicho lo mismo- sí, es cierto. Pero yo no integro ningún órgano directivo de Cabildo.
-¿Sigue pensando en que habría que destituir al fiscal de Corte, Jorge Díaz?
-Sí, claro. Primero, porque el fiscal de Corte sabe mucho de derecho procesal, es muy trabajador, pero no tiene el perfil de fiscal de Corte porque promovió una reforma al sistema penal, que transformó el derecho penal en una especie de negocio. Los fiscales negocian con los indagados y los abogados la pena por el delito cometido. Mire, a un muchacho que rompió la puerta del vestuario de Aguada en un partido Aguada-Welcome, y que tuvo que pagar la puerta y el vidrio roto, resulta que lo condenaron a un año de prisión efectiva. Un año de prisión efectiva... Y (el empresario y sindicalista argentino Marcelo) Balcedo está en la casa. El traficante turco que lavó ocho millones de dólares y tiene una Ferrari no tuvo ni medio día preso, producto de la negociación.
-¿Eso quiere decir que hay una ley para pobres y otra para ricos?
-Sí, sí, pero eso siempre fue así, ¿eh? Ya el Martín Fierro en 1860 decía: "La ley es como tela de araña, y en mi ignorancia lo explico, no la tema el hombre rico, no la tema el que mande, pues la rompe el bicho grande y solo enrieda a los chicos".
Volviendo a Díaz, nosotros decimos que armó la causa contra Manini, el directorio del Partido Nacional sacó un comunicado expresando su malestar por la tarea de Díaz frente a Fiscalía, un diputado colorado le hizo un pedido de informes, el presidente de la República en la Ley de Presupuesto mandó un proyecto eliminando las instrucciones generales que Díaz le da a los fiscales y el Partido Colorado no lo votó, entonces se llegó a cambiar las condiciones para dar las instrucciones generales. Pero en esas instrucciones se les quita autonomía a los fiscales, porque Díaz les dice "usted tiene que hacer esto, esto y esto otro". Al cambiar la estructura de quien dicta las instrucciones generales, Díaz queda en minoría. Los que defienden las instrucciones generales a los fiscales, tienen que defender las instrucciones generales a los jueces, si son coherentes. Díaz va a pasar, como yo voy a pasar. Lo importante es otra cosa: si vos sostenés que hay que darles instrucciones generales a los fiscales, hay que sostener que hay que darles instrucciones generales a los jueces, y ahí desaparece el Estado de Derecho. Eso es lo grave. Díaz no importa, Lust no importa, Manini no importa. Lo importante es el sistema.
-¿Se precipitó al decir que si el presidente no lo cesaba, Cabildo Abierto debía abandonar la coalición?
-Me precipité, sí. Yo en su momento dije que estaba en juego el Estado de Derecho, después hablé con pila de compañeros y periodistas en el Parlamento, y me hicieron ver que era demasiado pensar en irnos de la coalición cuando había todo un proyecto de gobierno que recién arrancaba. Entonces, lo reconozco: en eso me precipité.
-¿Lo rezongaron por haber dicho eso?
-No, no. Nunca me rezongaron en Cabildo Abierto.
"Me precipité al decir que si no se iba Jorge Díaz Cabildo debía abandonar la coalición. En su momento dije que estaba en juego el Estado de Derecho, después hablé con pila de gente, y me hicieron ver que era demasiado pensar en irnos cuando había un proyecto de gobierno que recién arrancaba"
-Lust, en redes sociales muchos han bromeado con que las iniciales CA significan Casos Aislados, porque desde el riñón del partido se han querido minimizar algunos episodios. Pero lo cierto es que sumaron unos cuántos episodios polémicos que ponen en el ojo de la tormenta a figuras del partido: desde militantes con remeras neonazis; las declaraciones del diputado Martín Sodano con aquello de "si te gustó embarazarte bancatela"; la idea de que mujeres con tres hijos deben quedarse en su casa; un convencional que planteó la creación de "escuadrones de la muerte"; Rivera Elgue cuestionando en Twitter a Mieres y a Talvi; y el caso de Gastón Bianchi, quien iba a asumir como vicepresidente de la ANP y había publicado en su Facebook que los legisladores son "hienas castradas" y "cerdos cobardes". Todo en menos de un año de vida. ¿Qué opina usted de todo esto?
-Toda esa gente que dijo eso tiene derecho a decirlo, son opiniones. Lo que digo es lo siguiente: la izquierda se adueñó de la ética...
-Usted todavía no cayó en ninguna...
-Y no voy a caer. Porque yo esas cosas no las digo. Ni las pienso. Todo lo que la gente opine, defiendo su derecho a opinar como quiera. Y después tiene que asumir las consecuencias de su opinión. Ahora, ¿qué me parece? Yo con la mayoría de esas opiniones no coincido. Por ejemplo, que diga que los legisladores son "cerdos cobardes" o "ratas inmundas" no coincido, porque los conozco. A Bianchi y a otros sus declaraciones le costaron el cargo. O sea que Cabildo saneó la cancha. Es producto también de que Cabildo Abierto es un partido nuevo, no conoce demasiado a sus integrantes (a mí, por ejemplo, no me conocían). Yo recuerdo a San Agustín, con "el tribunal de la conciencia". Yo voy a un programa de televisión y me pueden preguntar lo que quieran. (Lucía) Topolansky dijo en un documental: "Nosotros éramos muy cuidadosos para analizar a quién íbamos a asesinar". Mujica dijo en la película de Kusturica que "la cosa más linda" es entrar con una 45 a robar a un banco. Si ellos opinan eso, está bien. Napoleón dijo que "la música era el mejor de los ruidos". Eliminó la filosofía de la Sorbona. A mí me parece muy mal, pero era Napoleón.
-¿Es el nuevo diputado rebelde del Parlamento como alguna vez lo fueron Víctor Sempron, Darío Pérez o Gonzalo Mujica en el FA?
-En el diario Perfil de Argentina me calificaron como "indomable". Pusieron mi entrevista en la tapa, al lado de una sobre Nacha Guevara en el Bailando. Yo lo que digo es que los diputados en general -y no sé si está bien o mal- votan muy alineados al partido al que pertenecen. Nunca un diputado vota distinto. Yo desde que asumí, en 10 o 12 leyes en más de 100 que se han aprobado, marqué mi discrepancia, y eso me ha dado el calificativo de rebelde. Yo he marcado discrepancia en algunos temas, que para mí son claves. En esos nunca voy a cambiar de opinión, porque son convicciones: todo lo que tenga que ver con lo forestal, con UPM, con la Constitución.
-¿Tenía margen este gobierno para zafar de una segunda planta de UPM, cuando el contrato ya estaba firmado por la administración anterior?
-Sí, el gobierno no zafa porque no quiere. El gobierno puede zafar hoy del contrato. ¿Qué fue a hacer el gobierno a UPM hace unos días? Fue a hablar con los patrones. Fue a monitorear la marcha de las obras. Ahí constataron que el tren tiene nueve meses de atraso, y la planta tiene algunos meses de atraso. UPM confesó que no tiene permisos ambientales vigentes. El plazo de los permisos que le otorgó el gobierno pasado terminó en noviembre de 2019. Ahí, con cinco permisos vencidos, pidió una prórroga de tres meses, que ya se terminó. Entonces, si el gobierno quisiera (cosa que no va a suceder, porque no quiere), les dice: "Bueno señores de UPM, ustedes no cumplieron con los permisos ambientales -que es lo más importante, por la salud de los uruguayos-, por lo tanto, yo paro la obra. Segundo, el tren que yo tenía que hacer de 273 kilómetros, en 80 de esos 273 el piso se está hundiendo. Por lo tanto, lo que a mí me costaba equis plata, ahora me cuesta 100 millones más". Lo dice (el ministro de Transporte y Obras Públicas, Luis Alberto) Heber esto.
"Según el contrato, yo tendría que hacer 400 expropiaciones, y ya voy por 1.040 y vienen más. Según el contrato, yo tendría que hacer 200 paso a nivel y conexiones, y voy en 1.600". Palabras de Heber, eh. El ministro Heber debería renunciar. Date cuenta que Heber dijo: "Puse todo el MTOP a trabajar para UPM". En un país serio ese ministro no dura ni media hora después de haber dicho eso en la televisión, en VTV lo dijo. Entonces, hoy el presidente tiene todo servido. "Señores, yo el contrato lo paro, y a mí no me vengan con un juicio, porque ustedes están incumpliendo, no tienen los permisos ambientales". ¿Qué hizo el ministro (de Ambiente, Adrián) Peña? Le puso una multa de 30.000 dólares, a una inversión de 4.000 millones de euros. Los tipos ni se enteraron de la multa, pero además, le conviene pagar la multa y listo. Están desesperados para que la obra salga y le permiten todo. Y todo es todo.
Yo digo: los políticos no se bañan en el Río Negro y viven en barrios caros. Está bien que vivan en barrios caros, pero la verdad que no viven frente al tren. Yo fui a Paysandú, mi ciudad natal, y el único balneario que tiene Young (donde viven 30.000 personas) lo destruyeron, para hacerle un paso de camión a UPM. Cortaron el único arroyo, arrasaron con todo, para que pasen los camiones de UPM. Los puentes no aguantan el paso, entonces van a ir por debajo de los puentes, haciendo calzadas, cortando los arroyos, desviando las aguas, causando un daño ambiental tremendo. El ministro Peña debería impedirlo, pero él trabaja para UPM.
-¿Piensa convocar a algún ministro más a sala?
-Sí, a Heber y a Peña. No sé si interpelación, pero sí que vengan a informarnos. ¿Están los permisos o no están los permisos?
-¿Es optimista de poder conseguir algo en su lucha o está resignado?
-La obra se para. El proyecto se cayó. Al proyecto de UPM lo paró la naturaleza. Hay obreros de UPM que están afectados con el virus, el suelo se está hundiendo, el Río Negro está seco, no hay agua. A eso sumale cómo le va a explicar el gobierno a la gente de Durazno, a la que le dijeron "no hacemos el bypass porque cuesta 40 millones" y van a gastar más de 150 millones en obras fuera del contrato, para UPM. Entonces, ¡paramos el proyecto!
-Se paró momentáneamente. Después se retomará...
-Pero al presidente de la República y los ministros les será insostenible explicarle al electorado: "Miren, yo cuando no le doy plata a la Universidad, cuando bajo 20.000 horas docentes en Primaria, cuando prohíbo esto y prohíbo aquello, le voy a dar 200 millones de dólares más a UPM". ¿Cómo lo resiste eso un presidente? La opinión pública se le va a volver en contra. Se detiene porque no se va a poder sostener. ¿Qué argumento va a dar el ministro de Ambiente cuando vea el río seco y la tierra hundida?
"Yo he marcado discrepancia en algunos temas, que para mí son claves. En esos nunca voy a cambiar de opinión, porque son convicciones: todo lo que tenga que ver con lo forestal, con UPM, con la Constitución"
-¿Por qué propone que el gobierno utilice medidas prontas de seguridad para evitar aglomeraciones? Vio que el uruguayo promedio escucha "medidas prontas de seguridad" y se le ponen los pelos de punta...
-No comparto eso. ¿Sabés qué pasa? Que el político es hipócrita. Montesquieu decía que si no eras corrupto, no podías ser político. Y decía que la hipocresía es "inherente" al ser político. Date cuenta que el otro día mataron dos vieneses, musulmanes en Viena, y el gobierno uruguayo sacó un comunicado solidarizándose con Austria. El mismo día mataron 20 universitarios afganos en Kabul, y Uruguay no se enteró. O sea que 20 afganos valen menos que dos europeos. Eso es hipocresía.
-¡Usted también es político, Lust!
-Sí, claro. Y soy hipócrita, sino no puedo ser político, ¿entendés? Mirá, las medidas prontas de seguridad se aplicaron hace 50 años. Un presidente de la democracia, autoritario como Pacheco Areco, decretaba medidas prontas de seguridad para cerrarte el programa tuyo de radio en Universal. ¿Cuál es el procedimiento de las medidas prontas de seguridad? El presidente las decreta y comunica a la Asamblea General. Y la Asamblea General en 24 horas le tiene que contestar si se aplican o no. En la Constitución hay poderes de emergencia para situaciones de emergencia. Hoy escuchamos que el ministro de Salud le "exhorta" a la gente a que no se reúna, el ministro de Turismo "exhorta" también, pero a mí por más que exhorten, hago lo que quiero... Pero si ponés una medida de pronta de seguridad, decís: entre el 1° de diciembre y el 31 de diciembre, en virtud de la situación de emergencia, están prohibidas las despedidas de fin de año, a la cual concurran más de tantas personas.
-Usted dice que no hay que demonizar la herramienta, por un uso abusivo y autoritario de esa herramienta en el pasado...
-Claro. Ponele que 20 cirujanos hayan matado 30 pacientes con un bisturí. ¿Vas a prohibir el bisturí? Lo que pasa que acá nadie va a querer pasar a la historia como el primer presidente de la democracia en volver a usar medidas prontas de seguridad, entonces hoy el jefe de Policía de Flores pasa por la plaza, mira un grupo de jóvenes y dice: "Acá no hay aglomeración". Y el jefe de Policía de Florida pasa por la plaza, está la misma cantidad de jóvenes, y dice: "Estos gurises están violando la ley". ¿Qué ley? No hay ley. Por eso, entiendo que se debería reglamentar por escrito, y la herramienta ya existe: las medidas prontas de seguridad, avaladas por la Constitución.
-¿A qué aspira como dirigente político?
-Como político me gusta la actividad legislativa, me parece la más importante. Me siento más cómodo acá en el Parlamento que en una tarea ejecutiva. El único poder representativo de la soberanía es el Poder Legislativo.
-¿Es feliz?
-Soy feliz, partiendo de la base que la felicidad no existe todo el tiempo.