El ciclismo en Francia fue protagonista una vez más, pero no por el Tour de France, sino por un curioso final en una carrera sub-23.
En concreto, dos ciclistas del equipo Saint Etienne dominaron la carrera hasta los últimos metros, literalmente. Ambos, abrazados, celebraron la victoria antes de tiempo y se relajaron previo a llegar a la meta pensando que tenían la victoria asegurada.
Pero no fue así. A poco de llegar, Simon Ruet, otro ciclista que competía, pedaleó más rápido y se quedó con la victoria.
Al mismo tiempo, los otros dos competidores fueron parte de una de las imágenes más graciosas a nivel deportivo. No es algo común que sucedan este tipo de acontecimientos, pero no es la primera vez que pasa, porque es habitual que los ciclistas festejen antes de llegar.