Liz Truss, la primera ministra británica, anunció en la mañana de este jueves que dimitirá como líder del Partido Conservador y dejará la jefatura del Gobierno en una semana, en cuanto se elija un sucesor.
A las puertas de la residencia oficial de Downing Street, Truss comenzó su breve discurso diciendo: “Asumí en un momento de gran inestabilidad económica e internacional. Las familias y los negocios están preocupados sobre cómo pagar sus cuentas. La guerra ilegal de Putin en Ucrania amenaza la seguridad de todo el continente. Y nuestro país se ha visto frenado durante demasiado tiempo por un bajo crecimiento económico”.
“Fui elegida por el Partido Conservador, con la orden de cambiar esto. Hemos ofrecido resultados en las facturas energéticas y rebajando la cotización social. Hemos planteado una visión para economía de baja fiscalidad y alto crecimiento que aprovecharía las libertades del Brexit”, sostuvo.
“Reconozco que, dada la situación, no puedo cumplir con esa orden por la cual fui electa. Es por eso que hablé con su majestad el rey [Carlos III], para notificarle que voy a renunciar como líder del Partido Conservador”, agregó.
Truss apuntó que se reunió con el presidente del Comité 1922 (como es conocida la bancada parlamentaria de los Conservadores), Graham Brady, para informar su decisión. “Acordamos que habrá una elección para definir el líder del partido, que se realizará la semana que viene. Esto asegurará que continuemos en un camino de planes fiscales para mantener la estabilidad de nuestra economía”, puntualizó.
“Continuaré como primera ministra, hasta que un sucesor sea elegido. Muchas gracias”, concluyó.
En las últimas horas, el número de diputados conservadores que pedían su dimisión se había disparado, lo que hacía prácticamente insostenible su continuidad al frente del Ejecutivo.
Truss se hallaba en la cuerda floja desde que, el pasado 23 de setiembre, la presentación de su plan fiscal, con una masiva bajada de impuestos, había sembrado el caos en los mercados y despertado la desconfianza en la economía británica.
Los políticos británicos piden elecciones
La ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon, se sumó este jueves a la petición de elecciones generales en el Reino Unido, porque considera que son “un imperativo democrático” tras el anuncio de dimisión de Liz Truss como primera ministra.
En un mensaje colgado en su cuenta de Twitter, la líder independentista escocesa señaló que “no hay palabras para describir este desastre total”, en alusión a las recientes turbulencias vividas en el Reino Unido por las decisiones del Ejecutivo de Truss.
“Va más allá de la hipérbole y la parodia. La realidad es que es la gente normal la que está pagando el precio”, opinó.
La dirigente del Partido Nacional Escocés dijo asimismo que “los intereses del partido ‘tory’ no deberían preocuparle a nadie ahora mismo” y aseveró que “unas elecciones generales son ahora un imperativo democrático”.
En esta línea se pronunció también hoy el líder del Partido Liberal Demócrata, Ed Davey, quien hizo otro llamamiento a la celebración de elecciones generales tras el anuncio de dimisión de Truss.
“No necesitamos otro primer ministro conservador que vaya tambaleándose de crisis en crisis”, consideró en un tuit el líder liberaldemócrata. Apuntó que “se necesitan unas elecciones generales ahora y a los conservadores fuera del poder”.
Por su parte, el líder de los conservadores en la Asamblea galesa, Andrew Davies, indicó que la primera ministra británica “ha hecho lo correcto al dimitir”. “Los ciudadanos, dondequiera que vivan en el Reino Unido, están preocupados, con razón, sobre la crisis del coste de la vida”, agregó.
Davies señaló que “el nuevo primer ministro debe afrontar esta situación con rapidez y proporcionar liderazgo, confianza y esperanza a todas las personas de todo el país”. “El Partido Conservador debe hacer frente a este desafío y cumplir para los ciudadanos de Gales y del Reino Unido”, agregó.
La primera ministra más breve de la historia
Al renunciar a 45 días de haber asumido el cargo, cuando fue nombrada por la fallecida reina Isabel II, Truss se convirtió en la jefa de Gobierno más breve de la historia británica.
A la mandataria conservadora le quedaban 73 días para superar la marca de George Canning, duque de Portland, que murió en agosto de 1827, 118 días después de asumir la jefatura del Ejecutivo.
Su sucesor, Frederick John Robinson, primer vizconde de Goderich, un miembro de la aristocracia rural británica, también conservador, superó esa marca por unos pocos días —mantuvo el Gobierno durante 143 días—.
Andrew Bonar Law, el único canadiense que ha gobernado el Reino Unido, se mantuvo en el poder durante 211 días, entre octubre de 1922 y mayo de 1923.
Encabezada por la actual premier, esta es la lista de gobernantes que ocuparon el cargo por menos tiempo:
Liz Truss (2022) - 45 días, a los que se sumará previsiblemente en torno a una semana como jefa de Gobierno interina.
2. George Canning (1827) - 118 días
3. Frederick John Robinson (1827/28) - 143 días
4. Andrew Bonar Law (1922/23) - 211 días
5. William Cavendish (1756/57) - 225 días
6. William Petty (1782/83) - 265 días
Con información de EFE