Tras realizar un descargo ante el departamento de gestión Humana de la Intendencia de Montevideo (IM) y presentar un recurso de revocación a la resolución de la investigación administrativa determinada por esa dirección, por la denuncia a la directora de Tv Ciudad, Alejandra Casablanca, por violencia laboral, Denisse Legrand volvió a hacer referencia al episodio que vivió durante los últimos meses.
Entrevistada por Las Cosas en su Sitio de Radio Sarandí, Legrand dijo que, si bien no puede hablar sobre el tema porque hay una investigación en curso, contó "lo difícil que es para una persona atravesar un proceso de denuncia".
"A mí, en general, me toca estar del otro lado, del lado en que las personas generan una denuncia y en que reciben la presión institucional. Yo viví una situación que ningún trabajador tiene que vivir, que es la violencia laboral y que tiene que ver con un episodio de violencia que nunca viví, capaz porque uno no se lo espera (por el lugar de trabajo), porque parecería ser un espacio seguro y previo a llegar a la denuncia agoté todos los mecanismos institucionales y políticos para evitar esto", aseguró.
En tal sentido, indicó que intentó todos los ámbitos para evitar el conflicto porque es una situación que "expone". "Me expone a mi como persona, como profesional, expone al canal, a la gestión y no tuve una respuesta ni de contención ni de apoyo ni de entender el problema político que significaba que una jerarquía hubiera ejercido una situación de violencia", reflexionó.
Comunicó que le ofrecieron que haga una denuncia, hecho que realizó en las horas siguientes con un acuerdo de confidencialidad, pero lamentó que al otro día ya se había filtrado la información. "Se sabía con detalle y lo grave de todo esto es todo lo que vino conexo a eso", sostuvo.
Legrand dijo que luego de que se dio a conocer la denuncia hubo una "mala dinámica institucional", una falta de capacidades básicas para "encarar la situación" y "cuestiones que escapan por toda la norma", este último por el hecho de que hubo asesores de la IM que trataron de averiguar sus antecedentes para -según dijo- "construir la idea de la mala víctima, la víctima problemática".
"Esto fue una práctica política institucional que no corresponde. Mucho se llenan la boca hablando de democracia y de los derechos y, sin embargo, incurren en este tipo de prácticas. A mi me encantaría saber cuál es la postura institucional porque cuando yo se lo planteé a la directora de comunicación, Ana de Rogatis, y al prosecretario de la Intendencia no tuve una devolución. Entonces yo no sé qué piensan sobre esto", se preguntó.
En esta línea, contó que le dijeron "hablá con Romano", en referencia al asesor de la comuna capitalina, el comunicador Gabriel Romano. "Yo no tengo que hablar con Romano porque no es un colega, es un asesor que cumple un lugar en la Intendencia de Montevideo. Entonces ¿cuál es la postura institucional? ¿qué piensa Carolina Cosse de esto? ¿Es una práctica que avala? Porque si no la rechaza, la avala", criticó.
Los periodistas le dijeron que Cosse puede decir que está esperando la definición de la investigación administrativa y no dar su palabra. No obstante, Legrand respondió: "Es una práctica de la política de la judicialización y decir: 'Ah, que defina la judicialización'. Bueno, a ver, una cuestión es lo jurídico, que eso se está investigando, y otra cuestión es lo político. Lo político es lo que está por sobre todas las cosas, porque lo político es lo que define la práctica que uno tiene, si se traduce o no en actos lo que uno dice en campaña y tiene que ver con que, si a mí -que soy una privilegiada- me pasa lo que me pasó, qué le puedo decir a una persona que tiene una situación de violencia en el ámbito del hogar y no tiene las herramientas que tengo yo", respondió.
"Por eso decidí atravesar este proceso en vez de quedarme callada. (Quedarse callada) era una opción que me lo ofrecieron. Por supuesto que me ofrecieron otras cosas para evitar esto y lo que me interesa es que podamos aprender (de la situación)", añadió.
Finalmente, en cuanto a los contenidos del programa, Legrand señaló que no se sentía cómoda con las formas y prácticas de hacer comunicación, y con la "manija". "Es difícil ser parte de la cara de algo en lo que no crees. Cuando uno no está cómodo y disiente con las prácticas, con la manija y la forma de hacer comunicación es difícil sostenerse. Entonces dije me bajo de esto. Un amigo me decía y qué querés, estos son hinchas y esto es una guerra", explicó.
Con respecto a los medios públicos, consideró que deben existir y deben que tener contenidos de calidad que "permitan democratizar discusiones y contenidos" que no hay en otros lugares.
"Cuando eso se corrió a un lugar que no me representaba, no hay nadie. Ya está, no quiero ser parte de eso. Yo creo en una comunicación articuladora, una discusión que se generen intercambios y no la supremacía de ideas porque tenés el poder y el control. Yo mis pelotas las corro todas, pero no voy a correr las pelotas de otras y no voy a tener posturas políticas que no son las mías", concluyó.