Las muertes por las fuertes lluvias en el estado brasileño de Rio Grande do Sul, en la frontera con Uruguay y Argentina, subieron a 13, informaron este jueves las autoridades regionales.
Además de los fallecidos, hay 12 heridos y 21 desaparecidos, en el marco de las inundaciones que ya han afectado a más de 44.600 personas en 134 municipios en la última semana, según la Defensa Civil local.
Hasta ahora, 5.257 personas han tenido que refugiarse en casas de parientes o amigos, y 3.079 se encuentran en refugios.
En imágenes difundidas en redes sociales, se ve cómo el caudal de agua es capaz de arrastrar grandes objetos, como una cosechadora e incluso una casa entera.
Algunos usuarios describen al evento como “escenas de una película apocalíptica”, y afirman que es “verdaderamente impactante”.
El gobierno regional alertó sobre un “riesgo hidrológico extremo” para las próximas 24 horas en buena parte del estado, y recomendó a los habitantes evitar las proximidades de los ríos, cuyo caudal continúa subiendo por las lluvias, y buscar refugio en un lugar seguro.
El gobernador de Rio Grande do Sul, Eduardo Leite, decretó en la noche del miércoles el estado de calamidad pública por un plazo de 180 días.
“Las aeronaves del estado están en actuación para hacer rescates y esperamos los refuerzos de las Fuerzas Armadas”, afirmó en un video colgado en redes sociales el gobernador, quien dijo que la prioridad en este momento es rescatar a las personas afectadas.
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, prometió este jueves, durante una visita al estado afectado, que destinará todos los recursos necesarios para enfrentar el impacto de las lluvias torrenciales. “El gobierno federal estará al 100% con el pueblo de Rio Grande do Sul para atender con recursos y para que podamos reparar los daños”, declaró el mandatario, quien aseguró que “no faltará ayuda” para cubrir las necesidades básicas de la población.
En tanto, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Uruguay emitió un comunicado oficial en el que “lamenta profundamente las pérdidas humanas y múltiples daños ocasionados”, a raíz de este fenómeno meteorológico. “Extendemos nuestra solidaridad con el gobierno de Brasil, el hermano estado de Rio Grande do Sul y su población”, añadió Cancillería.
Rio Grande do Sul, con una población de 11 millones de personas, ha sufrido en el último año el repetido golpe del fenómeno climático de El Niño, que provoca fuertes precipitaciones en el sur del país. En setiembre, un ciclón extratropical provocó más de 40 muertes en la región, y en noviembre una racha de lluvias torrenciales llevó al desplazamiento de miles de personas.
Con información de EFE