En Uruguay existe una brecha de género en la selección de personas para ocupar puestos de liderazgo de alto perfil que perjudica a las mujeres, quienes son elegidas para ocupar el 30,3% de los roles en direcciones y gerencias de las empresas, de acuerdo con datos del Monitor Laboral de la consultora Advice.
El documento, que se publica mensualmente, dedica en su edición de marzo un informe especial a “la participación de las mujeres en procesos de selección de personal”.
Los resultados para este informe enfocado en mujeres son producto del análisis de 2.457 procesos de selección realizados por Advice entre 2019 y 2023, para los que se recibieron 153.300 postulaciones.
“Aunque a nivel general no se observa una diferencia drástica entre el porcentaje de mujeres y varones que se presentan a los procesos de selección, si se desagregan los datos por algunas variables clave, como la edad y el nivel de jerarquía de los cargos que se seleccionan, aparecen disparidades más marcadas”, explica la publicación.
En general, un 47,7% de las postulaciones recibidas a los procesos de selección que se realizaron en el período 2019-2023 correspondieron a mujeres.
Este dato en sí, según Advice, “no representa una diferencia drástica respecto al porcentaje de varones”, debido a que la tasa de participación de las mujeres en el mundo laboral es mucho menor.
De hecho, entre 2019 y 2023, la tasa de actividad de las mujeres fue, en promedio, 15,1 puntos porcentuales menor que la de los varones, según el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Sin embargo, si los datos se desagregan por edad, la participación femenina en procesos de selección “disminuye significativamente cuanto más grande es la mujer, lo opuesto a lo que pasa con los hombres”.
De hecho, el desplazamiento de las postulaciones por género muestra que, a edades más tempranas, hay una mayor participación de mujeres que de hombres. Pero, a partir de los 30 años, empieza a ser menor la cantidad de mujeres que se presentan a procesos de selección en comparación con los varones.
“La brecha se profundiza a tal punto que, después de los 55 años, menos de una de cada cuatro postulaciones corresponden a mujeres”, expresa el texto.
El análisis añade una nueva dimensión a la cuestión etaria que explicaría este fenómeno: “La correlación de la edad con el nivel de jerarquía de los cargos que se seleccionan”.
Por ejemplo: en procesos de selección para puestos de dirección y gerencia, solo un 30,3% de las postulaciones recibidas corresponden a mujeres.
“Los puestos de nivel operativo reciben más postulaciones de personas jóvenes (la mayor frecuencia de casos se observa en la franja de 25 a 29 años), mientras que los puestos de liderazgo reciben más postulaciones de personas mayores de 30 años, dado que se asocian a etapas más avanzadas de la trayectoria laboral”, detalla Advice.
De hecho, en puestos operativos, en un 51,5% de casos se presentan mujeres. Sin embargo, solo en un 37,7% se las selecciona para puestos de liderazgo, y este porcentaje baja a más de 7 puntos si se hace foco solo en “direcciones y gerencias”.
Allí, la brecha con respecto a los hombres es la más grande y representa un 19,7%. En cuanto a los “liderazgos intermedios”, las mujeres representan un 40,8%.
Por último, el documento alude a la selección de estas postulantes, y dice que “no se encuentra una diferencia estadísticamente significativa” entre los porcentajes de mujeres que se postulan y las que finalmente son seleccionadas.
“Esta comparación revela que el resultado de los procesos de selección se encuentra condicionado por el insumo de las postulaciones, y enfatiza la necesidad de continuar investigando y desarrollando herramientas para combatir las limitaciones estructurales que determinan que menos mujeres que varones se postulen a procesos de selección de puestos de liderazgo, como las horas de trabajo no remunerado en tareas del hogar, el tiempo dedicado al cuidado de la familia y la falta de oportunidades de preparación”, concluye la investigación.