El presidente de la República, Luis Lacalle Pou, asistió este lunes a la inauguración de un evento internacional sobre contaminación de plásticos, con sede en Uruguay, que se desarrolló en el Centro de Convenciones de Punta del Este. Además, contó con la participación de la directora ejecutiva del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, Inger Andersen, el ministro de Ambiente, Adrián Peña y sus pares de la región.
El ministerio de Ambiente de Uruguay junto con el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente tiene a cargo la organización de este encuentro que recibirá representantes de más de 150 países.
Dicho evento tiene como objetivo la elaboración un instrumento internacional jurídicamente vinculante sobre la contaminación plástica.
En su oratoria, el presidente habló sobre el conocimiento. “Hoy pertenecemos a una generación que tiene acceso a la información como nunca en la historia. Hoy sabemos qué es lo que hace bien, qué es lo que hace mal. Sabemos lo que deja una huella, sabemos lo que no deja una huella y tenemos todo el menú de opciones y herramientas”, dijo.
En este sentido, agregó: “Ni un ciudadano, ni un gobernante puede decir ‘yo no sé, yo no sabía de las acciones que estaba tomando’”.
“No solo hay diagnóstico, porque no solo sabemos el mal que se causa, sino también sabemos el camino que podemos recorrer para revertirlo o para generar el bien. El conocimiento desde el reconocimiento de la asunción de responsabilidades”, consideró.
En cuanto a la responsabilidad, dijo que a veces hay que maximizarla: “O es culpa de las grandes potencias, o es culpa de los multilaterales; siempre la culpa es del otro, nunca es nuestra”. En esta línea, indicó que es un momento “muy importante”, con base en el conocimiento, para que cada uno asuma su responsabilidad.
“Desde el momento en que Uruguay se hace cargo de esta reunión, asume una responsabilidad, no de la organización del evento sino del contenido del evento”, remarcó y añadió: “La responsabilidad de la sociedad civil, motor de muchos cambios (la organizada y los simples ciudadanos), la responsabilidad de los productores, de la industria, de los gobiernos, que tiene que tener la característica, no solo de penar, castigar, sino de promover, sobre todo de promover determinados usos y determinadas costumbres, y después el optimismo”.
“Cualquier ser humano puede ser optimista porque sí”, sostuvo. Sin embargo, “cuando un gobernante se para al frente de un grupo de personas, tiene que fundamentar su optimismo personal y sin anclajes”, precisó.
En Uruguay, señaló, se juntan cotidianamente y planifican acciones, coordinan acciones, el ministro de Ambiente, Ganadería, Industria, Relaciones Exteriores y Economía. “Uruguay hace muchos años que adoptó el concepto de Uruguay Natural, que como muchos conceptos que ha habido a lo largo del mundo es aspiracional, es una definición de lo que el Uruguay entiende que es como se siente y además cómo tiene que ser visto en el mundo. Es por nuestro territorio, es por nuestra gente”, concluyó.