El pasado 11 de abril, la joven argentina Felicitas Alvite, de 20 años, protagonizó un siniestro de tránsito cuyas imágenes se hicieron virales.

Esa noche, Alvite tripulaba un Volkswagen Trend con el que cruzó a muy alta velocidad y con luz roja una esquina de la ciudad de La Plata. En el cruce embistió una motocicleta conducida por Rubén Armand, de 36 años, quien falleció a causa del terrible impacto.

Felicitas Alvite, "La Toretto de La Plata", culpó al motociclista fallecido en el accidente. Una terrible sorete. El audio es de la hermana de la asesina. Las imágenes dicen lo contrario. La imputada pidió eximición de prisión. Mató y pide seguir en libertad. Insólito. pic.twitter.com/vK53hVUeya

— Matías Duarte (@DuarteMati) April 20, 2024

Alvite era “influencer” en redes sociales, y solía hacer posteos en los que comentaba su fanatismo por los autos, hasta el punto de hacerse llamar “la Toretto”. Este apodo hace referencia al personaje Dominic Toretto que interpreta Vin Diesel en la saga de películas Rápido y furioso.

En los días posteriores al siniestro, los abogados Flavio Giemmo y Santiago Irisarri, defensores de Alvite, intentaron por todos los medios evitar que su patrocinada ingresara en prisión preventiva. En aquel entonces argumentaron que la joven no era “corredora de picadas” ni una “persona que usa su automóvil para matar”.

“Todo lo contrario: es una chica de bien, sana, que no se droga ni consume prácticamente alcohol y que nunca, absolutamente nunca, había tenido inconveniente alguno con la ley ni con terceros”, sostuvieron.

Sin embargo, de poco valieron esas alegaciones, ya que la “Toretto”, terminó recluida en la cárcel de Melchor Romero a espera de juicio.

Ahora, la imprudente conductora atraviesa un delicado cuadro de salud y espera las pericias que le permitirían lograr la prisión domiciliaria hasta que comience el juicio oral.

El abogado Flavio Giemmo refirió que su defendida está “muy angustiada” y bajo tratamiento médico. “La pericia psicológica salió bien y ahora falta un análisis psiquiátrico que estamos pidiendo que se adelante”, agregó el letrado, según recoge el periódico platense La Capital.

La imputada sufrió recientemente un ataque de pánico. “Le hicimos saber al juzgado que siga sumando elementos para que pueda resolver sobre el pedido de prisión domiciliaria”, indicó el abogado, quien detalló que su patrocinada experimenta episodios de extrema angustia, “lo que generó que las manos de Felicitas se pongan rígidas y que comience a hiperventilar”.

Si el Juzgado de Garantías que interviene en el caso considera que Alvite necesita de una atención médica que no se le puede proporcionar en prisión, será excarcelada y trasladada a un centro de salud.

“Sigue en el pabellón de mujeres en Melchor Romero y se lleva bien con sus compañeras de celda”, dijo Giemmo.