El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, mostró
este jueves sintonía con el expresidente Barack Obama (2009-2017) y se
reencontró con su rival en las elecciones, la vicepresidenta Kamala Harris,
durante el funeral de Estado del exmandatario Jimmy Carter (1977-1981),
fallecido a los 100 años.
El republicano fue uno de los políticos que acudió al funeral de Estado de
Carter, que tuvo lugar en la Catedral Nacional de Washington, y el que más
atención acaparó a su llegada, cuando quedan menos de dos semanas para que se
celebre su investidura.
Además de él, acudieron el presidente saliente, Joe Biden, y todos los
exgobernantes del país vivos: Barack Obama (2009-2017), Bill Clinton
(1993-2001) y George W. Bush (2001-2009).
Uno de los momentos que más sorprendió antes de que empezara la misa fue la
sintonía que mostraron Trump y Obama, que se sentaron juntos y estuvieron
hablando de manera distendida y hasta se les vio reír juntos en algún momento.
Sin embargo, uno de los reencuentros más esperados de la misa fue el de Trump
con Harris, los dos candidatos de las elecciones del pasado 5 de noviembre.
Acompañada por el segundo caballero, Douglas Emhoff, Harris entró directa a su
asiento, sin saludar a ninguno de los mandatarios presentes, ni siquiera a
Obama, con quien mantiene una relación de amistad desde hace años.
Esta era la primera vez que coincidía con Trump en público desde que perdiera
contra él en los comicios para tomar el relevo de Biden.
Sin embargo, las cámaras captaron el momento en el que Harris
notó que Obama y Trump estaban charlando. Las imágenes la muestran incómoda, ya
que mira a los dos expresidentes y recoge un programa del funeral.
A su llegada, Trump, que iba a acompañado de Melania Trump, se reencontró
también con el que fue su expresidente durante su primer mandato (2017-2021),
Mike Pence, después de años sin verse y enemistados porque este certificó la
victoria de Biden en 2021.
Una de sus funciones como vicepresidente saliente era ratificar los resultados
de las elecciones de 2020, es decir, confirmar la derrota de Trump.
Sin embargo, Trump nunca reconoció los resultados electorales, instó a Pence a
revertirlo sin éxito e incitó el 6 de enero de 2021 a sus seguidores a marchar
al Capitolio para impedir que se certificara la victoria de Biden.
Pence estaba sentado en la fila posterior al asiento de Trump junto al
exvicepresidente de Bill Clinton (1993-2001), Albert Arnold Gore, que también
estrechó la mano al futuro presidente.
Ni los Bush ni los Clinton saludaron al resto de expresidentes, aunque Barack
Obama se puso de pie cuando llegaron George y Laura Bush.
Obama fue el único exmandatario que no acudió acompañado de su esposa, Michelle
Obama, que se encuentra en Hawái, según avanzó la cadena CNN.
En la misa también se encontraba el primer ministro canadiense, Justin Trudeau,
quien esta misma semana anunció que abandonará el cargo, y que se encuentra en
un episodio de tensión con Trump después de que el republicano haya insistido
en diversas ocasiones durante las últimas semanas en convertir a Canadá en el
estado 51 de Estados Unidos
Con información de EFE