La población de Gaza, donde entra solamente un 10% de los alimentos necesarios desde el comienzo del conflicto, “se enfrenta a la posibilidad inmediata de morir de hambre”, alertó hoy el Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas.
“Los suministros de alimentos y agua son prácticamente inexistentes y solo una fracción de lo que se necesita está llegando a través de las fronteras. Con el invierno acercándose rápidamente, los refugios inseguros y hacinados y la falta de agua potable, los civiles se enfrentan a la posibilidad inmediata de morir de hambre”, dijo la directora ejecutiva del PMA, Cindy McCain.
Desde el estallido del conflicto con Hamás el pasado 7 de octubre, tras un ataque del grupo islamista que dejó 1.200 muertos en Israel, los bombardeos israelíes se han saldado con más de 11.500 fallecidos en Gaza y la destrucción de gran parte de infraestructuras, viviendas o edificios residenciales.
Asimismo, en torno a 1,5 millones de personas están desplazadas, la mayor parte de ellas al sur de la Franja, e Israel ha impuesto un bloqueo casi total al acceso de comida, agua, gasolina o suministros como medicinas, lo que causa una extrema crisis humanitaria en Gaza, sobre todo en sus hospitales, gran parte de ellos sin funcionar.
Toma del puerto
Por su parte, el Ejército israelí anunció este jueves que ha tomado el control del puerto de Gaza, principal instalación portuaria y pesquera del enclave y que, según alegó, era “utilizado por Hamás con fines terroristas”.
En una operación conjunta llevada a cabo en los últimos días, mientras las tropas profundizan su invasión terrestre sobre Gaza y buscan controlar por completo la ciudad homónima, soldados de un cuerpo blindado y de la flotilla israelí “han obtenido el control operativo del puerto”, que hasta ahora “estaba controlado por el grupo terrorista Hamás”.
Según un comunicado militar, en las acciones para hacerse con el control de la instalación portuaria, situada en el barrio gazatí de Al Rimal, también participaron fuerzas aéreas y del cuerpo de ingenieros de combate, y en ella “se destruyeron diez pozos de túneles terroristas y cuatro estructuras más”, en la que murieron una decena de milicianos.
Durante la operación también “se limpiaron todos los edificios de la zona del puerto”, un espacio que Hamás “utilizó como centro de entrenamiento para sus fuerzas de comando naval para planificar y ejecutar ataques terroristas navale”.
“Bajo la apariencia de un puerto civil, Hamás utilizó la zona para entrenar y llevar a cabo ataques terroristas, al mismo tiempo que utilizaba buques civiles y de policía del puerto de Gaza”, agregó el Ejército, que sigue avanzando en territorio gazatí.
Ahora, los tanques israelíes rodean el Hospital Al Shifa, en el centro de la ciudad de Gaza, donde siguen por segundo día con una incursión “precisa y selectiva” que busca hallar y desmantelar parte de lo que consideran que es el corazón militar de Hamás en Gaza, que denuncian que se encuentra en este complejo médico y sus entornos.
A su vez, las tropas dicen controlar ya todo el norte del enclave y el campo de refugiados de Al Shati, ubicado en el área costera y septentrional de la ciudad de Gaza, mientras ayer avanzaron por la principal avenida marítima, hacia la localidad de Deir Balah, en el centro de la Franja.
EFE