El jueves se produjo una lucha armada a plena luz del día en el polígono industrial de Riudellots de la Selva, en la provincia catalana de Girona. La tumultuosa pelea acabó con un hombre muerto y su hermano herido.
Según consigna la agencia noticiosa EFE, la disputa habría sido un ajuste de cuentas entre dos bandas, y en total participaron unas diez personas.
El hombre que resultó herido por un tiro en una pierna y un golpe con una barra de hierro fue trasladado al Hospital Josep Trueta de la capital gerundense, donde lo atendieron en el servicio de urgencias y este viernes recibió el alta.
El fallecido, de 34 años y origen rumano, que recibió un disparo en el estómago que le causó la muerte, regentaba junto al hermano herido y a otros familiares el taller mecánico de camiones y la empresa de transporte internacional de mercancías donde sucedieron los hechos.
En el video puede apreciarse con claridad cómo el ahora fallecido —de camiseta blanca— ataca con una barra de metal a otro sujeto. El agredido, que ya había sido golpeado por otro de los involucrados, pierde el equilibro y cae, pero aun así logra empuñar un arma de fuego y disparar contra su oponente. Luego los atacantes se dan a la fuga.
Los agentes de la División de Investigación Criminal de Girona creen que se trata de un ajuste de cuentas e intentan averiguar la relación entre víctimas y asaltantes, a los que buscan tras darse a la fuga en dos coches Volkswagen Golf, y al menos uno de ellos con matrícula francesa.
Tras la pelea y posterior tiroteo, que tuvo lugar pasadas las 13:00 horas en la Avinguda Mas Vilà, la policía activó el dispositivo “Jaula” para cerrar las carreteras y localizar a los dos vehículos en los que huyeron los agresores, pero no dio resultados.
Los investigadores trabajan sobre la hipótesis de que el cabecilla de los asaltantes es de origen magrebí, al igual que otros miembros de la banda. Se tomó declaración a los numerosos testigos de otras empresas que vieron e incluso filmaron lo sucedido y también se recogieron las imágenes de las cámaras de seguridad del polígono, que son más de un centenar.